Entrenar, ejercitando los movimientos como si..., está bien para la vida personal.

En política gesticular, aparentar, sermonear ideas no practicadas, ir de descubridores y prometer en la ignorancia se asemeja a los entrenamientos de los bailarines frente al espejo: es verse bonito, pero nada más. 

España es España, tal como se fue formando siglo tras siglo. España es España, con todos sus defectos y con todas sus metas a perfeccionar. España es lo que la historia ha ido haciendo de ella, y esa historia la hemos ido escribiendo todos y cada uno de nosotros.

Existen muchas formas de no ser fiel a los principios fundamentales que los españoles aceptamos como norma de convivencia. Todas tienen un denominador común: la equidistancia interesada, el equilibrio partidista. Veamos.

Lo peor es jurar, prometer la letra y el espíritu de la Constitución y no tener la honradez política para cumplir o renunciar. Aquí, en España nunca pasa nada. Se convive con los intereses que da el cargo a la vez que se desprecia públicamente lo que se juró o prometió.

Le siguen las políticas del postureo, dependientes, todas ellas, del lugar donde se quieran implantar. Son las equidistancias ideológicas y pragmáticas de los que se dicen salvadores: “Sí, pero depende de lo que el otro diga”.

Es la postura del agazapado. Un ejemplo claro es Pedro Sánchez y su equipo.

La manera más común del equilibrismo político es aquella que, conforme con una sustanciosa remuneración, dice lo que le digan, escribe copiando de guías generalistas y, si tiene que votar, intenta hacerlo el último para ser uno más y ganador. Un ejemplo claro son las agrupaciones Mareas, Ahoras e Izquierda Unida.

Demandar que el gobierno debe llevar la iniciativa en problemas de separatismo a la vez que se le cortan las manos para que no pueda utilizar las herramientas que la Constitución le ofrece es querer estar en misa y repicando.  

Equilibrio no tiene nada que ver con ser equilibrista. Lo primero es propio de hombres de Estado, lo segundo es propio de los conseguidores.

Colabora con el blog

Forma parte de los contenidos del Blog del Suscriptor
Escribir un artículo