Onda Cero, mañana del viernes 21 de julio, el locutor da entrada al consejero de Presidencia Catalán, Jordi Turull, para que explique desde su visión algunos asuntos de la actualidad en su comunidad. Casi de inmediato y sin que nadie le hubiera preguntado comenzó la lectura de su discurso secesionista fabricado a modo de cajón de sastre ocultador de cualquier trama de corrupción.
Ante la casi oscarizada entrada de la Guardia Civil en el hemiciclo autonómico, su discurso se tornó mas vehemente. Como si de una película de Marvel se tratara, el súperhéroe indepe dijo que con sus súper poderes prohibió la entrada de estos funcionarios públicos en ciertas dependencias del Govern. Tras esta heroicidad sin parangón volvió a su discurso victimista para compararse con el PP diciendo que no veía a la Guardia Civil entrando en la sede del PP, a lo que el periodista contestó diciendo: “La Guardia Civil no, pero la Policía Nacional revisó Génova de arriba a abajo” ¿La reacción del súper indepe? Solo dijo que no estaba dispuesto a recibir la humillación de ver a funcionarios públicos campar a sus anchas en las instituciones catalanas.
Ciertamente hay que admitir que este superhéroe se cree el discurso secesionista a pies juntillas. Escuchándole incluso llegas a dudar de tu fe para plantearte adorar en un altar a Mas, Junqueras, Puigdemont y sus discípulos.
Pero los sperhéroes están tiesos, por ello el saleroso Junqueras pide un eurito a cada catalán para financiar la consulta ilegal. La situación está pasando muy rápidamente de tensa a circense, y que me perdonen los payasos de circo. Esto me pasa por intentar entender de algún modo el discurso y pretensiones secesionistas, creo que no lo volveré a hacer.