Esta foto lo dice todo. En un solo plano aparece el fiscal anticorrupción del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en su incursión a las dependencias de la Generalidad de Cataluña. Entraba en pesquisa de los delitos más graves que son concebibles en el ejercicio de la función y de la política públicas, la malversación de lo que se les encomendó para conseguir otros fines distinto de los aprobados.
Mira al Mozo de Escuadra que guarda la puerta (no se sabe si para impedir que entren o que salgan indeseables). Su mirada es potente, escrutadora, inquisitorial si cabe. La del mozo está velada por el buenrollismo que muchas veces no se observa ni en las más extremas situaciones (¡ay la Ley Mordaza!), pero el resultado es el esperable: ¡Vaya usted con bien, siempre a sus órdenes!
Como no puede ser de otra manera, cuál sería la ley de Sierra Morena o, sin alargarnos tanto, la del desfiladero del Bruch. Como algo hemos avanzado, como algo hemos aprendido, seremos cuerdos y, sobre todo, se impondrá el seny sobre la rauxa y respetaremos y haremos respetar la Constitución.