El 16 de agosto de 1977 el mundo de la música se vistió de luto como respeto al más grande del Rock, falleció Elvis Presley. Vamos a dar algunas pinceladas de lo que fue su vida artística.
Considerado una de las voces más populares del siglo XX, en el año 1956 electrificaba América con The Ed Sullivan Show. Su música y personalidad fueron arrolladoras fusionando el Country blanco y el Rhythm and blues negro. Cambió permanentemente el rostro de la cultura popular estadounidense.
Su popularidad traspasó fronteras y fue un símbolo para todo el mundo de la vitalidad, la rebeldía y el buen humor de su país -palabras de Jimmy Carter-.
Elvis es una figura emblemática en la vida estadounidense, cuya presencia era una estrella allí donde iba. El rango cultural de su música se amplió hasta el punto que no sólo se incluyen los éxitos del momento, si no los recitales patrióticos como el Gospel y el Country puro o el blues realmente sucio. Elvis emergió como artista un gran rockero, un proveedor de Schlock, un símbolo en potencia.
Su amiga Mary Hinds que lleva 25 años seguidos acudiendo a la semana de Elvis añadió que el cantante fue un referente, pasó de cantante a leyenda y luego a mito. En los años 50 incluyó éxitos imperecederos como Suspicious, Hound dog o Heartbreak hotel.
Antes de Elvis no había nada y me atrevo a decir que después de Elvis no ha quedado gran cosa -palabras de Edi Clavo-.