Durante estas fechas la Covid está dando duro en Euskadi con preocupantes datos al mismo tiempo que se acelera la vacunación que será la tabla de salvación por la que se está apostando con esperanzadores resultados.
El oasis vasco tiene los peores datos y los vascos están que echan humo, pero y los vascos están que echan humo pero eso no será suficiente para desbancar al lehendakari ni al PNV sin importar su gestión, porque casi siempre sale victorioso gracias a su fiel electorado y a un número de sufragios de otros votantes que creen en los beneficios de votar al nacionalismo vasco que se apoya en el PSE para gobernar y de lo malo mejor que sea así porque la alternativa es Bildu y esos aplicarían medidas más restrictivas.
El PNV es eterno e incombustible con una sólida base electoral que le perdona todo.
El nacionalismo vasco sacará partido de la crisis sanitaria porque toda la culpa será del gobierno central y gracias al PNV se saldrá de está situación.
Hacen lo mismo con todos los temas, se aprovechan siendo los más listos sin importar que el Gobierno vasco cambie de manos porque el PNV tiene mayoría en las diputaciones vascas, con la sartén por el mango y el Gobierno vasco controlado.