Todos sabemos que en España la Monarquía es la única institución que reconoce a los cónyuges de los reyes el título de Rey o Reina. Tienen una asignación económica, despacho propio y una serie de obligaciones de representación.
La familia de los políticos no tiene responsabilidades de gobierno, son los representantes de la soberanía nacional y nadie ha votado a sus respectivos cónyuges, que no son nada, no representan a nadie, y que si son insultados, tendrán que denunciar como cualquier ciudadano ante la ley.
Por todo esto es increíble que nuestro presidente del Gobierno haya retirado a la embajadora en Argentina porque Milei haya llamado corrupta a su querida mujer. Esto ya es el colmo de la prepotencia, se cree que el Estado es suyo y que está jugando al "y tú más" con todos los ciudadanos de Argentina y de España.
Su soberbia es absoluta, el amor le ciega, Begoña le hizo retirarse a pensar cinco días. Son muchos días sin jefe de Gobierno. Ahora su amor por Begoña va a crearnos un problema grave entre Argentina y España.
En fin, sólo el divorcio nos salvará.