Este jueves, la veterana periodista Chelo García-Cortés fue la encargada de presentar Sálvame Limón, el primer tramo del programa. Sin embargo, nada le salía bien: no podía leer los textos de presentación porque no funcionaba el teleprónter, y los vídeos no entraban en el momento adecuado. “Aver, buenas tardes, hoy quieren tomarme el pelo mientras presento esta primera hora del programa”, advertía Chelo a la audiencia.
Sin embargo, eso parecía peccata minuta comparado con lo que estaba por llegar. En un momento dado, la presentadora se levantaba sin avisar, cortando así el plano, por lo que la dirección decidió “castigarla” haciendo que su rostro no saliese en plano.
Para ello, tapaban la cámara con una mano, o con un papel que la ocultase solo a ella. También jugaban con el tiro de cámara, y hacían mucho zoom, o solo sacaban algún detalle de su cuerpo, como podrían ser sus manos.
A esto se le suma que, más tarde, también le distorsionaban el sonido que se recogía por su micrófono. “Uy, esta tarde tengo diferentes voces” decía Chelo, provocando la risa del resto de compañeros de Sálvame.
Ante semejante espectáculo, los espectadores comenzaron a compartir sus impresiones a través de las redes sociales y convirtieron a la que fuese concursante de Supervivientes en uno de los temas más comentados de la tarde. “Menos mal que viene San Valentín y no los Santos Inocentes”, decía ella a modo de consuelo.
Hay que destacar que este tipo de troleo a los colaboradores de Sálvame es algo habitual. Por ejemplo, María Patiño ha tenido que lidiar muchas tardes con el hecho de que su imagen apareciese duplicada, con un efecto espejo que no le gustaba nada.