Una nueva serie turca ha llegado a Mediaset. La plataforma Mitele PLUS ha preestrenado este jueves Omer: sueños robados (Yaralı Kuşlar), un título que se emitirá próximamente en abierto, tal y como ha anunciado la cadena, en línea con la estrategia que han seguido anteriormente con estas ficciones.
Tal y como ha adelantado Mediaset, Mitele PLUS ofrecerá en exclusiva a sus suscriptores un capítulo diario de la serie de lunes a viernes. Además, a partir del lunes 8 de marzo, Divinity ofrecerá la ficción en abierto en tira diaria de lunes a viernes a las 19:00 horas. La serie iniciará su andadura con una sesión especial de larga duración. Además, a medida que los capítulos se vayan emitiendo en Divinity, podrán verse en la versión gratuita de Mitele. No obstante, la ficción podría acabar teniendo un hueco en Telecinco, igual que ha ocurrido con algunas de sus predecesoras, como Love is in the air o Mi hogar, mi destino.
Tres prometedores intérpretes turcos -Gizem Arıkan en el papel de Meryem, Emre Mete Sönmez como Ömer y Ali Yasin Özegemen en la piel de Levent- protagonizan esta emotiva historia de amor fraternal, resiliencia y búsqueda de una vida mejor. Estrenada en 2019, Ömer: Sueños rotos ha sido vendida en una decena de países de todo el mundo, entre los que figuran Israel, México, Colombia, Lituania, Bulgaria, Marruecos y Macedonia.
De qué va Ömer: Sueños rotos
Emitida en Turquía entre abril y noviembre de 2019, esta serie narra la historia de Meryem, una joven que ha pasado los últimos cinco años criando a su hermano adoptivo Ömer, sin saber que es el hijo secuestrado de un adinerado hombre, Levent Metehanoglü, a quien conocerán inesperadamente.
El pequeño Ömer y su hermana adoptiva se verán así divividos entre dos mundos opuestos, las peligrosas calles del barrio en el que crecieron y el lujoso ambiente de la familia Metehanoğlu. Ambos emprenderán un viaje existencial mientras huyen de un despiadado criminal y tratan de llevar una nueva vida en Estambul.
Meryem Çelik era una adolescente cuando alguien entregó el bebé Ömer a Durmus, su malvado padre, que pretendía vender al pequeño pero fue encarcelado antes de que pudiera culminar su oscuro negocio. Desde entonces, Meryem ha luchado por mantener a Ömer apartado de los peligros de las calles, trabajando noche y día para que ambos puedan llevar una vida decente. La joven ignora que su hermano es en realidad el hijo de un influyente empresario y que fue secuestrado durante una lucha de poder por el control del imperio empresarial familiar. Tras salir de prisión, Durmus descubre que Ömer tiene un extraordinario talento para forzar cerraduras, habilidad que pone en conocimiento de su jefe Tekin, un criminal despiadado que controla el barrio.
En los últimos años, Levent Metehanoğlu, un adinerado industrial roto por el dolor, ha estado navegado sin rumbo por el Mediterráneo tras la muerte de su mujer y el secuestro de su hijo. Durante este tiempo, la dirección de la compañía familiar ha recaído en su hermano Bahadir y el negocio se está yendo a la ruina. Tras regresar a Estambul, conoce fortuitamente a Ömer y Meryem, un encuentro que cambiará sus vidas para siempre.
Apuesta por el drama
Con este estreno, Divinity confirma su giro de la comedia romántica al drama. Un viraje que no es de extrañar, teniendo en cuenta que las historias trágicas suelen funcionar mejor que las cómicas.
No hace falta irse a Nova o Divinity para comprobarlo. Mientras que Mujer o Mi hija, las dos ficciones turcas que emite actualmente Antena 3, arrasan cada día en que se emiten, Telecinco no ha tenido la misma suerte con Love is in the air.
En cuanto a la particular guerra entre Nova y Divinity las cosas no son muy diferentes. En diciembre, la de Atresmedia se imponía con rotundidad sobre la de Mediaset (2,5% vs. 1,6%) gracias al buen funcionamiento de sus dramas turcos.