En abril de 2018, Telecinco estrenaba una nueva edición de Factor X, que pronto dio mucho de qué hablar. Lapili y Jirafa Rey, los primos que forman el grupo ‘Glitch Gyals’, sorprendieron a los coaches del programa y a las redes sociales con su tema 'Cómeme el donut', que se convirtió instantáneamente en trending topic y en un fenómeno viral.
“Si el Factor X es algo que te diferencie, entonces nosotros lo tenemos demasiado elevado”, advertían los jóvenes. “No tengo palabras”, decía Laura Pausini, mentora del talent show, después de escucharles y verles bailar twerking. “Lo veo como un espectáculo más serio de lo que parece, Dalí sería vuestro fan", añadía Fernando Montesinos.
Pronto ambos artistas malagueños adquirían una gran proyección; incluso eran imitados en Tu cara me suena por Silvia Abril y José Corbacho.
Tres años después, Jirafa Rey ha vuelto a la televisión, tanto para cantar como para encontrar el amor. Y es que ha sido uno de los participantes de un especial de segundas oportunidades de First Dates; y es que Alejandro Robles, o Álex, la persona que hay detrás de Jirafa Rey, ya acudió al programa de Carlos Sobera en el año 2017, cuando todavía era un desconocido.
En esta ocasión, la cita de Álex fue Yago, un estudiante y artista de Barcelona. Entre ambos hubo una química muy calmada en la que se habló de arte, de juegos de rol, de la exposición en las redes sociales y también de música.
De hecho, Álex contó que acaba de terminar un disco un disco dedicado a personajes de terror, y cantó uno de sus temas, ‘Para los vampiros’. Además, explicó a su cita (que también tiene algunas canciones grabadas) que con la música había podido dar bolos por toda España, pero que con la pandemia la cosa se paró.
Al final, Álex y Yago tuvieron buena química y decidieron volver a verse en una segunda cita. Además, quedaron para participar en una partida de rol que organiza Álex.
"Que el niño Jesús bendiga al caudillo"
Otros de los protagonistas de la noche han sido Mamen y Aurelio, o Ari, una pareja de profundas creencias católicas. De hecho, para ella era fundamental que su pareja sea tan religiosa como ella, si bien, en la anterior ocasión se encontró con un ateo.
Pronto Mamen y Ari se dieron cuenta de que tienen formas de ser y pensar muy similares. Uno de los momentos más controvertidos tuvo lugar al legar los platos, cuando Ari bendijo la mesa diciendo “El niño Jesús que nació en el portalillo bendiga esta mesa, a nosotros y al caudillo”, algo que no pasó desapercibido en las redes sociales.
Otra de las perlas que se soltaron en la cita era que Ari tenía 33 años, la edad con la que “mataron a Cristo y a José Antonio”, en referencia a Primo de Rivera. Se señaló al feminismo como una “ideología satánica”. “El feminismo es una ideología moderna basada absolutamente en concepciones materialistas del mundo y que no tiene cabida en una mente cristiana” matizaban los comensales, que estaban de acuerdo en todo, y que también decidieron volver a verse.