El Precio Justo, uno de los formatos más longevos de la televisión mundial y uno de los más exitosos del planeta, regresa esta noche a Telecinco con una versión renovada presentada por Carlos Sobera.
Y lo hará, por supuesto, con sus icónicos juegos, su mítica sintonía y una sencilla mecánica basada en el cálculo para que los espectadores participen en el juego desde casa.
Juegos míticos como ‘El Precipicio’, en el que el margen de error del concursante a la hora de acertar un precio determina que el escalador del tablero se caiga por la montaña o corone la cima; o ‘El Minigolf’, en el que el jugador debe ordenar precios del más barato al más caro sin equivocarse para aproximar una pelota de golf al hoyo y así ganar los premios.
También ‘El Plinko’, donde el concursante lanza discos en un tablero en el que hay ranuras con cantidades concretas de dinero y debe relacionar esas cantidades con el valor de determinados objetos; y ‘La cuenta por favor’, donde se pone a prueba la capacidad del participante para calcular el importe de varios artículos de la compra diaria.
Pero, en un momento actual con tantos vendedores y tantas diferencias de precios, ¿cómo se decide cuál es el precio verdadero? ¿cómo se ajusta? Nathalie García, la consejera delegada de Fremantle, la productora del concurso, lo explicaba hace unos días.
"Se coge el precio de la casa oficial, cada objeto es de una marca. Eso lo estuvimos comentando por el tema de las ofertas y se tiene en cuenta si hay alguna oferta. Esto se comprueba el día de la grabación y se registra", contaba.
La mecánica
El Precio Justo consta de dos Rondas Iniciales que incluyen Pujas, Juegos y Ruleta; la Ronda Semifinal en la que se decide el finalista; y una última ronda en la que el único ganador opta a llevarse el Escaparate Final del programa.
Todas las personas del público del plató son jugadores potenciales, pero solo algunos de ellos, seleccionados por sorteo, abandonarán sus asientos para concursar.