Tras superar un duro casting, solo los cincuenta mejores candidatos de entre los 70.000 inscritos lucharán en las cocinas de MasterChef por conseguir el delantal que les acredite como concursantes de la novena edición.
En el primer programa, una vez elegidos los quince aspirantes de esta novena edición, viajaron a Mallorca. Allí debutaron con un cocinado solidario, tomando el relevo de la Asociación Zaqueo preparando 150 raciones, en el Parc de la Mar, donde confluyen la Catedral de Mallorca y el emblemático Paseo Marítimo de Palma.
Cada equipo cocinó dos platos con algunos de los productos locales más sabrosos de un menú diseñado por los chefs Maca de Castro y Santi Taura, ambos con una estrella Michelin, quienes pasaron por las cocinas para vigilar de cerca que todo salga bien.