Celia Villalobos ha generado un aluvión de críticas por su última intervención en La hora de La 1. La exministra, que colabora habitualmente en el programa de TVE, ha expresado este lunes su opinión sobre el asesinato de las pequeñas Anna y Olivia a manos de su padre, aprovechando para lanzar un discurso negacionista de la violencia de género.
La colaboradora comentaba que recientemente una madre ha matado a su hija de cuatro años en Barcelona para "fastidiar al padre" y recordó que "en el año 2019, 12 mujeres y cinco hombres hicieron lo mismo".
La que fuera diputada del Partito Popular aseguró que le preocupa y le duele "el futuro de esa madre", pero defendía que le duele igual que "convirtamos a los hombres en el enemigo de la mujer". Esta frase hacía intervenir a la presentadora del espacio, Mónica López: "A ver, no estamos convirtiendo a los hombres en el enemigo de la mujer", espetaba.
Villalobos no tardó en utilizar este caso para cargar contra la izquierda, en concreto contra Podemos. La andaluza recalcaba que en sus tiempos como alcaldesa de Málaga ayudó a muchas víctimas de violencia machista: "Yo he salvado a muchas mujeres y, ¿sabes qué pasaba? Que muchas de ellas denunciaban y al final volvían porque no tenían un medio para mantener a sus hijos". Era entonces cuando aprovechaba para mencionar al partido morado: "Tenemos que acabar con ello. Es un problema de dinero. Pero, por favor, no convirtamos esto en una batalla porque yo estoy escuchando a determinados líderes de Podemos que me asustan y me preocupan".
"Esto no es una batalla política", aseveraba la presentadora, recordando que el asunto del debate era "el asesinato de dos niñas a manos de su padre", pero la exministra popular insistía en su argumento: "Quiero que se distinga de un hombre maltratador y un hombre normal y corriente. Lo siento, las mujeres no somos víctimas. Sé que es políticamente incorrecto", concluía.
Estas declaraciones provocaron una oleada de reacciones en redes sociales. Muchos de los espectadores han criticado que la expolítica pueda negar la violencia de género en la televisión pública sin ningún tipo de consecuencia y han llegado a pedir su despido del programa.