José Antonio Canales Rivera lleva dos meses sin aparecer en Sálvame. Ni el colaborador ni el programa habían dado explicaciones sobre su prolongada ausencia hasta este martes, cuando Carlota Corredera ha explicado la razón por la que había un disfraz de Spiderman en el plató.
"Este disfraz es la explicación a la ruptura, no sé si con opciones de reconciliación o no, entre Canales Rivera y la dirección de Sálvame", ha expresado la presentadora, asegurando que de momento se trata de un "cese temporal de la convivencia".
Todo se remonta al pasado 13 de junio, cuando el torero ocupó por última vez su puesto de trabajo. El programa recogió entonces el testimonio de Miriam, una chica que aseguraba haber tenido un affaire con Canales, adjuntando como prueba una foto con el perro del colaborador y capturas de los mensajes en tono íntimo que intercambiaron.
En uno de esos mensajes, el diestro le decía a la joven lo siguiente: "Deja abierta una ventana que me pongo el traje de Spiderman y entro por la ventana". Por este motivo, la dirección del programa propuso a José Antonio acudir al plató vestido como el famoso hombre-araña días después de la polémica.
En un principio, el colaborador aceptó, pero al llegar el día se echó atrás y decidió no ponerse el disfraz. "Se le comunicó que si no accedía a cumplir con su palabra se tenía que ir a su casa", ha relatado Carlota.
Además, el programa ha podido hablar por teléfono con el diestro, que ha explicado lo que sucedió: "Me echaron para casa porque me negué a vestirme de Spiderman, ni más ni menos. Miquel me dijo 'si no te vistes de Spiderman no hay programa, te puedes ir para casa'. A buen entendedor, pocas palabras bastan, y me fui para casa", narra en la conversación.
"Yo he hecho muchas cosas en ese programa, pero me he negado a entrar en eso", prosigue Canales. "¿Qué hago yo sentado en un plató de máxima audiencia vestido de Spiderman? Iba a sentir que hacía el ridículo. Miquel me dijo que me fuera y me fui. Si algún día me llaman, veremos lo que pasa".