“Porque en MasterChef creemos que la experiencia es un grado, vuelve MasterChef Abuelos. Si tu abuela cocina mejor que nadie o tienes un abuelo que borda todos los guisos, estamos deseando conocerle. Anímale a apuntarse a Masterchef Abuelos y que nos enseñe a todos lo que es bueno”. Así reza una promoción que ya se ha lanzado desde MasterChef para buscar nuevos aspirantes. Y es que la versión senior del programa, que conocimos la pasada Navidad, trabaja ya en su vuelta.
Resulta llamativo cómo MasterChef no se dirige a los propios abuelos en sí, sino a sus nietos, o quizá a sus hijos. Y es que para participar hay que apuntarse a la selección de concursantes a través de un formulario de inscripción disponible en la web de RTVE, algo que puede resultar complejo para muchos de los chefs en potencia que ya hayan cumplido los 70 y los 80 años.
De momento, desconocemos cuándo tiene previsto lanzarse esta nueva entrega del programa, que al menos en su nacimiento constó de un único capítulo especial en el que resultó ganadora Guadalupe Fiñana, una entrañable abuela de 86 años.
El importante mensaje de ‘MasterChef abuelos’
MasterChef Abuelos nació en 2020 como un especial que rendía homenaje a toda una generación y que presentó en cocinas una divertida competición entre un grupo de aprendices muy experimentados. Tal como se explicó entonces, el objetivo era homenajear a los mayores en un año en el que la pandemia había resultado devastadora.
En la noche del 25 de diciembre el programa de Shine fue la segunda opción de la noche, por detrás de Tu cara me suena, con un 12,6% y 1.592.000 espectadores, siendo visto en algún momento por 4.625.000 personas.
A diferencia de su versión con anónimos, en el que vemos a personas reales que están trabajando para perfeccionar sus habilidades en el mundo culinario para abrirse paso en el mismo, los abuelos competían de otra manera más distendida.
Eran personas procedentes de todos los puntos, llenos de experiencias variadas, pero que comparten una ilusión común, la cocina. Los abuelos aspirantes se nos han mostrado como personas apasionadas en lo que hacen. Su concentración les permite ignorar las dificultades y los fracasos.
Las historias que comparten los concursantes son interesantes en cada edición de MasterChef, pero en la versión abuelos el programa está diseñado para ayudarnos a conocer un poco mejor a cada uno de ellos. Cuentan por qué les encanta cocinar y qué los inspiró a embarcarse en un programa así cuando ya parecían haberlo hecho todo en sus vidas.
Reivindican un sitio en la televisión para los mayores, suman un granito de arena más a otros proyectos similares como La Voz Senior. Dan valiosas lecciones de vida a través de la gastronomía y sus historias son algo con lo que podemos relacionarnos.
En cierto modo, competir en MasterChef Abuelos es un regalo que se hace uno mismo, pues allí nadie va buscando likes, seguidores ni un cambio de vida radical. El programa genera interés debido a la variedad de concursantes y las ideas que comparten, porque todos tienen una historia que vale la pena escuchar. Y más si se repiten momentos como en el que cocinaron junto a los aspirantes de MasterChef Junior, demostrando que la gastronomía no entiende de edad.
Ganar está bien, por supuesto. De hecho, Guadalupe Fiñana se llevó 12.000 euros a su casa, si bien su victoria significó mucho más. Que aunque estemos en tiempos difíciles, llenos de incertidumbres, tenemos que seguir activos, sin importar nuestras circunstancias ni nuestra edad.
Que hay que seguir haciendo cosas que nos gusten, que nos hagan felices, que no tenemos que tirar la toalla nunca. Y aunque pase el tiempo siempre habrá un hueco en el que encajes y hasta destaques por encima de los demás.
En ese sentido, hay que destacar una vez más la labor de servicio público de RTVE a través de este tipo de formatos, sirviendo de entretenimiento, de evasión, de compañía, y en este caso particular, de inspiración.