Este miércoles Pablo Motos tuvo como invitado en El Hormiguero al actor Hovik Keuchkerian, conocido por dar vida a Bogotá en La casa de papel. Tras su entrevista y el posterior juego de la tarjeta de El Hormiguero, Motos estrenó una nueva sección, bautizada como Me voy a pasar de la raya.
El comunicador realizará en ella un monólogo sobre algún tema que le parezca interesante, y el elegido para su primera reflexión fue el rencor. “No puedo con lo políticamente correcto. Antes me indignaba, pero ahora es que me aburro” dijo el valenciano. “Me aburro de los quejicas, de los que sin tener idea de la vida se atreven a dar lecciones desde el ordenador. La vida es salvaje, injusta, cruel y no es neutral, esto es lo que hay. Y tenemos que tener libertad para decir lo que piensas sin que haya un linchamiento mediático”, dijo a la audiencia, mirando a cámara mientras que una imagen urbana le servía de fondo.
Motos dijo que “persiguen que nos enfrentemos, que nos enfademos y no pensemos porque pensar es peligroso. De vez en cuando es bueno pasarse de la raya y que pase lo que tenga que pasar”, en referencia al título de la sección.
También dijo que “el rencor no daña a quien lo provoca sino a quien lo padece. El rencor nos hace peores personas. ¿Y todo por qué? ¿Qué pasó para que le cojamos semejante tirria a esa persona? El rencor o el resentimiento no nace siempre de una ofensa recibida”, apuntaba.
Tras relacionar el rencor y la envidia, apuntó que este sentimiento destruye y que hay que desterrarlo “por higiene y por inteligencia”. Para terminar, invitó a la audiencia a que “nos empeñemos en no recordar lo que cualquier gilipollas dijo o no dijo de nosotros, ¡qué le den!”.
Las formas y el fondo utilizado por Pablo Motos desconcertó a los espectadores, que dejaron sus impresiones a través de las redes sociales. Algunos se preguntaban que a qué venía este monólogo, que rompe con el ritmo habitual del programa. Otros veían en Pablo la figura de un psicólogo, y un grupo de espectadores se quejaban de que estuviese dando "la chapa" cuando ya debería haber empezado Veo cómo cantas, que arrancó su emisión 15 minutos después de lo anunciado.