Diego Losada es, desde hace un mes, el rostro de los Telediarios del fin de semana en TVE. El presentador se ha sumado a la experimentada Lara Siscar para formar un tándem que aporte nuevos enfoques a la edición "más familiar" del informativo de la cadena pública, tal y como él mismo ha contado en conversación con BLUPER.
Pese a su juventud, el periodista es un viejo conocido en RTVE, pues ha formado parte del Canal 24 Horas y de formatos tan distintos como España Directo, Informe Semanal, el Telediario Matinal o La Mañana. Pero, según él mismo recalca, su primera experiencia en la Corporación fue, precisamente, como "grumete" en el informativo de los fines de semana. De ahí que su regreso a este formato le haga revivir sus inicios profesionales y querer aportar todo lo aprendido en aquellos años.
Entre los retos que Losada, Siscar y el resto del equipo asumen en esta nueva etapa está el mostrarse a los espectadores como "personas a quienes se les puede contar su historia". Para ello, el presentador afirma que saldrán del plató y estarán a pie de calle también de lunes a viernes, recogiendo para el TD Fin de Semana los temas que más afectan a los ciudadanos.
¿Cómo has afrontado esta nueva etapa al frente de los Telediarios del fin de semana?
Con mucha ilusión, porque para mí se cierra un círculo. Hace 12 años entré en RTVE como redactor del Telediario de fin de semana, como 'grumete', así que ahora es un honor compartir el timón de este gran barco con Lara y con todo el equipo. Además, es de esos equipos que son como una pequeña familia: es más pequeño, pero igual de solvente, con una gran carga de trabajo, eso permite aprender mucho del resto de compañeros.
Ahora siento que en el fin de semana hay muchos 'yoes' de hace 12 años. Hay un equipo que conjuga juventud y mucha ilusión con veteranía y ese ADN que lleva TVE. Yo recuerdo que en mis tres primeros me desarrollé como reportero y redactor en la calle, ahora la intención es no perder eso, que los presentadores de este tiempo no nos quedemos en el plató y ganemos en cercanía, que la gente nos perciba como personas a quienes se les puede contar su historia. A Lara y a mí nos gustará estar en la calle, aprovechando los días que tenemos entre semana, para reportajear y dar otra mirada sobre los principales temas que afectan a los ciudadanos.
¿Hay algún nexo que una a los TD de fin de semana y los de lunes a viernes, o potenciáis que sean diferentes?
Los Telediarios ya son familiares de por sí, pero el del fin de semana es el que más se ve en familia, y ayuda el hecho de que quienes lo hacemos seamos una familia profesional. Por la experiencia que tengo como espectador de RTVE, el Telediario que se ve en familia un sábado o un domingo por la tarde sirve de 'chispa' para generar debates en el seno de la familia, y eso es porque hemos elegido bien los temas que preocupan a los diferentes miembros de la familia.
Se habla mucho de que los jóvenes ya no tienen apego a la televisión. ¿Te imaginas a un adolescente viendo el Telediario con su padre?
Me interesa muchísimo el debate sobre la brecha generacional de los distintos medios. Yo creo que no está todo perdido con los jóvenes, el vínculo familiar continúa y, por lo tanto, la televisión sí puede ser el medio que una, sin que le hagamos la competencia a las redes sociales.
¿Cómo se puede recuperar el interés de las nuevas generaciones sin perder el rigor?
Tratamos de acercarnos a los nuevos formatos, en el 24 horas hacíamos '24 horas en un minuto'. Lo que está de moda es la naturalidad. Los chavales ven en Twitch a personas que les hablan a los ojos sin maquillaje, sin grandes aspavientos de los que a veces pecamos en la televisión. Esto nos da pistas de que la era de lo artificial ha terminado, los espectadores nos tienen que ver como personas normales que les hablan de tú a tú.
¿Qué tal has encajado con Lara Siscar?
Hace nueve años empecé en el Canal 24 horas con Lara Siscar. Hay fotos en las que aparezco junto a ella y tengo cara de adolescente. Para mí es un placer cerrar ese círculo con ella, porque aprendí mucho con ella y creo que tenemos distintas maneras de comunicar, eso va a complementar. El trabajo de Lara en el Telediario hasta este tiempo ha sido impecable y nosotros venimos a sumar. El hecho de que seamos dos refuerza esa idea de que este es un Telediario familiar con dos personas que se llevan bien. No tengo miedo a sonreír en el Telediario porque la gente lo hace. Y eso potencia la naturalidad y la cercanía, que son importantes. Nos tienen que ver cercanos porque lo somos.
Has tenido una temporada algo convulsa por las entrevistas en 'La noche en 24 horas'. ¿Temes que el salto a La 1 te haga tener más presiones de determinados partidos?
Presentar un Telediario es bien distinto a un formato de análisis político. Esta temporada me ha tocado sustituir a Fortes y ha habido algunas entrevistas que han tenido esa dimensión mediática, pero yo lo encajaría como una anécdota dentro de todo lo que ha pasado en este año. He presentado más de 20 o 30 programas de La Noche en 24 horas, de los cuales sólo se habla de una o dos entrevistas en las que ocurrieron ciertas cosas que quizá hoy volvería a hacer. Si hacen una alusión directa a nuestro trabajo, creo que tenemos la obligación de poner los puntos sobre las íes. En cualquier caso, estoy totalmente convencido de que se consigue mucho más con una sonrisa que cerrando mucho las cejas. En cuanto a las críticas, si decimos que RTVE es la televisión de todos, porque lo es, tenemos que asumir y resignarnos a que también nos critiquen todos. Creo que es positivo recibir críticas siempre y cuando sean constructivas, así que no las temo.
En ese sentido, ¿cómo gestionas que media España esté en tu contra y al día siguiente ya no se acuerde porque está en tu contra la otra media?
No creo que media España se pusiera en contra. Al final cuando haces bien tu trabajo se generan críticas. Si repreguntas sobre algo que es medio verdad, o que es injusto, igual esa persona se sienta molesta, pero estamos haciendo nuestro trabajo. En ese programa tuve que entrevistar a todos los partidos políticos y recibí críticas de partidos contrarios. No porque te critiquen vas a dejar de hacer tu trabajo como consideras que tienes que hacer. Yo considero que el trabajo está bien hecho.
En la época de polarización que se está viviendo, ¿te sientes liberado al no informar tanto de política como en el 24 Horas?
La política no tiene tanta densidad los fines de semana, pero sí tienes la facultad de tener más tiempo para permitirte un análisis con más perspectiva. Me encanta la política y no me sentiría orgulloso si me tuviera que librar de ello. Habrá política, pero también otros temas que afectan a los ciudadanos y que entre semana no tienen tanto peso. Además, tenemos un plató que está muy avanzado tecnológicamente y que tiene muchísimas posibilidades. Siempre hemos tratado de poner en marcha otras formas de contar las cosas para ilustrarlas y hacerlas más entendibles.
¿Cómo llevas en lo personal el trabajar los fines de semana?
Sigo con mi banda de rock como hobby, Durden, sigo haciendo deporte... Me he perdido la boda de mi mejor amigo, que fue el día del estreno, pero la ilusión de este proyecto me puede.
No es habitual que un presentador de informativos tenga una banda de rock...
Cuando presenté el Telediario Matinal durante tres años era una faceta que ocultaba por miedo al qué dirán y a que alguien pudiera pensar que eso no es serio para un presentador del Telediario. Pero somos personas, ¿por qué no? Es algo con lo que lo paso bien, ¿eso me va a hacer peor periodista, va a minar mi credibilidad? No lo creo. El trabajo sigue siendo igual. Es un registro más y a nadie le debería asustar ni es criticable.
¿Te sientes cómodo con el título de 'todoterreno'?
Siempre he aspirado a eso. Me he inspirado los profesionales a los que admiro, como Lorenzo Milá. Es una ventaja haber estado en otro tipo de programas para volver al Telediario y ganar en cercanía. A los de informativos se nos ve más fríos y a los de programas más cercanos, esa dimensión histórica se tiene que ir diluyendo.
Competir con Matías Prats y Mónica Carrillo, ¿es un acicate o asusta?
También con Pepe Ribagorda, Ángeles Blanco, los compañeros de Cuatro al Día... Para mí es un honor. Son profesionales con los que he crecido. El fin de semana es muy competitivo, pero también sabemos cómo podemos ganarnos el favor del público y que nos tomen como referencia en ese Telediario familiar.