El éxito de las series turcas en España ha llevado a estas ficciones a compartir protagonismo en las parrillas con las producciones estadounidenses. El principal referente de la ficción turca en abierto en este país es, sin duda, Antena 3, que sentó un precedente con el éxito indiscutible de Mujer y Mi hija, a las que se han sumado otros títulos como Infiel, Inocentes o Tierra amarga.
El auge de las turcas no ha impedido a Atresmedia seguir apostando por la producción nacional, pero también por otros mercados internacionales con los que la cadena prueba suerte. Es el caso de las ficciones francesas, que en los últimos meses han tenido un creciente protagonismo en la programación de Antena 3.
Tras la emisión de Jacqueline Sauvage: ¿víctima o culpable? y el estreno de ACI: Alta Capacidad Intelectual, que actualmente se emite en el prime time del miércoles, la cadena sumará próximamente un nuevo título procedente del país galo: El día que quemé mi corazón, una miniserie basada en hechos reales que confirma la tendencia globalizadora de la ficción en abierto.
El éxito de las series turcas ha abierto una puerta para importar ficciones del país otomano, pero también de otros mercados que siguen creando producciones competitivas en abierto. El caso francés es un claro ejemplo de ello, pues los títulos por los que ha apostado Atresmedia llegan a España avalados por una excelente acogida en su país de origen.
Así, El día que quemé mi corazón se emitirá en España tras haber cosechado más de seis millones de espectadores en Francia, mientras que ACI: Alta Capacidad Intelectual se convirtió en la tercera serie más vista de la historia de la televisión gala y sedujo en su estreno a nada menos que 10 millones de espectadores.
Por el momento, las ficciones francesas no han logrado emular a las turcas, aunque tampoco han pasado desapercibidas para el público español. En el caso de ACI, su estreno firmó un buen 15,8% de cuota de pantalla y 1.957.000 espectadores de media pese a haberse enfrentado a La última tentación, que demostró la fidelidad de su público con un 16,9% de share y 1.997.000 espectadores.
En el caso de Jacqueline Sauvage: ¿víctima o culpable? se demostró que no sólo las producciones turcas son capaces de competir de tú a tú con otras ficciones o con los formatos de entretenimiento líderes. El estreno de la miniserie, el pasado 3 de mayo, dio la sorpresa y lideró con holgura el prime time del lunes con un 18.4% y 2.180.000 espectadores frente al 15.5% y 2.338.000 televidentes de Supervivientes: última hora.
Pero Atresmedia no ha sido la única en apostar por ficciones internacionales en abierto más allá de los mercados estadounidense y turco. Mediaset ha hecho lo propio con producciones como la francesa Nina, una enfermera diferente, o las italianas DOC y Lejos de ti. Sin embargo, ninguna de ellas ha conseguido destacar en audiencias.
De esta manera, las televisiones generalistas españolas demuestran que sus miras están puestas en el mercado europeo para importar producciones internacionales que supongan, como ha ocurrido con las turcas, un valor añadido al variado catálogo de series nacionales del que pueden disfrutar los espectadores.