Después de probar suerte con Sálvame Tomate, El Precio Justo, Alta tensión y adelantar su prime time a las 20 horas con Secret Story, Telecinco decidió apostar por una versión vespertina y más desenfadada de Ya es mediodía para luchar contra Pasapalabra.
Hoy, más de tres meses después de su estreno, esta nueva arma no ha conseguido dañar ni lo más mínimo al concurso de Roberto Leal, que cierra febrero con su mayor distancia histórica sobre el magacín presentado por Sonsoles Ónega.
Según datos de Kantar, el concurso de Antena 3 ha promediado en el mes de febrero un 22,9% de cuota de pantalla y 2.826.000 espectadores, su mejor mes de la temporada y con una distancia de 10,3 puntos sobre Ya son las ocho (12,6% y 1.568.000 espectadores).
Cuando el programa de Ónega echó a andar a mediados de noviembre, la diferencia era de 9,7 puntos. Es decir, que se ha incrementado en seis décimas. Y es que, aunque el programa de Telecinco ha mejorado en cinco décimas (de 12,1 a 12,6), Pasapalabra ha crecido 1,1 puntos (de 21,8 a 22,9).
Lo mismo ocurre en espectadores. En sus dos primeras semanas en antena, el formato de Unicorn Content promedió un 12,1% y 1.526.000 espectadores, mientras que el concurso de Antena 3 congregó a un 21,8% y 2.723.000 espectadores. Tres meses después, el primero suma 42.000 espectadores más y el segundo 103.000 más.
Esta semana, además, tras la decisión de Mediaset de emitir Pasión de Gavilanes en la franja de Sálvame Lemon Tea, la tarde de Telecinco se ha hundido y con ello Ya son las ocho. Ayer, por ejemplo, el programa promedió un escaso 10,5% y 1,3 millones, lejos de Pasapalabra, que anotó un 22,4% y 2,8 millones.
La quinta arma
La primera arma de Telecinco contra Pasapalabra fue Sálvame Tomate, que durante los primeros meses consiguió mantener a raya al concurso presentado por Roberto Leal preparando una serie de "bombas". Sin embargo, sólo dos meses después, el programa de Antena 3 no sólo dio el sorpasso a su rival, sino que empezó a acrecentar su diferencia.
Varios meses después, en abril de 2021, Mediaset España intentó probar suerte con un concurso (El Precio Justo) para intentar mejorar sus datos en la franja de 20 a 21 horas. De nada sirvió. Con la excusa de la llegada de la Eurocopa 2020 a su parrilla, el grupo optó por relegar el programa presentado por Carlos Sobera a Cuatro. Apenas había promediado un 13% de cuota de pantalla, empeorando los datos del Tomate.
Durante el verano, Telecinco siguió apostando por el programa de La Fábrica de la Tele hasta que a principios de septiembre estrenó Alta tensión, el concurso presentado por el otrora presentador de Pasapalabra, Christian Gálvez. Sólo aguantó en parrilla una semana tras caer por debajo del millón de espectadores.
Esto llevó al grupo a llevar a cabo una revolución 'histórica': adelantar sus contenidos estelares a las 20:00 horas y apostar por una tira diaria de su nuevo reality, Secret Story. La casa de los secretos. También fue una estrategia fallida. La cadena perdió cuatro puntos porcentuales respeto al mismo periodo del año anterior con la emisión de la tira diaria de Secret Story, pasando de un 16% de cuota con Sálvame Tomate a un 12%.
[Más información: 'Ya son las ocho', la quinta arma de Telecinco contra 'Pasapalabra': ¿dónde tiene el listón de audiencia?]