RTVE llevará a cabo recortes en su programación para poder pagar el costoso Mundial de Qatar

Hace ahora dos meses, RTVE sacaba pecho por haberse hecho con los derechos del polémico Mundial de fútbol de Qatar, una monarquía absoluta donde no se respetan los derechos humanos y donde han muerto 6.500 trabajadores en las obras de los estadios.

Lo hacía tras haber puesto sobre la mesa de Mediapro, la propietaria de los derechos, una oferta de entre 30 y 35  millones de euros y así haber superado a las de Atresmedia y Mediaset España, según fuentes consultadas por BLUPER. 

Entonces, el presidente de RTVE, José Manuel Pérez Tornero, defendió esta compra porque "el presupuesto de la Corporación RTVE para 2022 posibilita optar por la adquisición de derechos de un evento deportivo como es el Mundial de Fútbol Qatar 2022”. 

Además, entre los argumentos esgrimidos en privado se encontraba también el hecho de que la Corporación había obtenido durante 2021 un beneficio de 46 millones de euros, a la espera de conocer las aportaciones de los operadores de televisión y de comunicaciones.

Sin embargo, tal y como temían los profesionales de la casa, lo cierto es que esta polémica compra en realidad va a ser posible gracias a importantes recortes en la programación de la radiotelevisión pública que ya se están llevando a cabo y que se incrementarán en las próximas fechas.

Tanto es así que el presidente se encuentra actualmente paralizando cualquier tipo de proyecto que se le presenta y el sentir general, tanto por los pasillos de la Corporación como en las productoras que negocian con la cadena pública, es que el profesor "lo para todo". 

Sin apenas ficción

De hecho, sólo hay que echar un vistazo a la parilla de La 1 para darse cuenta de ello. Así, por ejemplo, desde finales del pasado febrero que despidiera la serie Dos vidas, la cadena emite en sus sobremesa series extranjeras que habían sido adquiridas para RTVE Play. 

Primero llegaría la británica Victoria, que se mantendría un mes antena, y desde finales de marzo emite Downton Abbey, que llegará a su final para finales de mayo. Para entonces, Pérez Tornero no tendrá aprobada ninguna nueva serie diaria ya que, de momento, no tiene intención de aprobarla en el próximo consejo.

Como ya publicamos en exclusiva, esa ficción tiene nombre y productora. Se trata de La Promesa, una nueva ficción de la mano de Bambú Producciones que estará ambientada en 1915 y que se rodará en los platós de Infinia en Madrid cuando finalmente se le de luz verde.

Y lo mismo está ocurriendo con la ficción de prime time. De momento, el presidente sólo ha aprobado Los pacientes del doctor García, adaptación de la obra de Almudena Grandes, y las renovaciones de La Caza y HIT por sendas terceras temporadas. 

Además, tal y como publicamos este viernes en exclusiva, la Corporación no tiene ninguna intención de renovar Cuéntame cómo paso por una temporada completa más (19 capítulos) y sólo piensa en darle un final mediante una temporada corta o una tv-movie. 

A todo ello se le suma que ahora mismo la cadena pública apenas cuenta con series en cartera. En estos momentos tiene pendiente de estrenos las ficciones coproducidas con Amazon, Parot y Sin límites, y su primera ficción junto a Alea Media, Fuerza de Paz, la cual fue adelantada en exclusiva por BLUPER. 

En cuanto a entretenimiento, ocurre algo similar. Y es que, más allá de las renovaciones de MasterChef y Maestros de la costura, el presidente apenas ha dado luz verde a nuevos grandes programas más allá de la renovación de La noche D, el concurso Te ha tocado y el access prime time de bajo presupuesto, Enredad@s. 

Un cese, su primera gran crisis

Esta política de 'estancamiento' explicaría muy bien el cese a primeros de marzo de la directora de Contenidos Generales de RTVE, Amalia Martínez de Velasco. Entonces, como contamos en EL ESPAÑOL-Invertia, el presidente decidió destituirla por haber perdido su confianza en ella al no haber sido resolutiva en su capacidad de gestión.

Sin embargo, otras fuentes explicaban a EL ESPAÑOL-Invertia que la realidad es que la dirección le había frenado todos los proyectos que había presentado y tampoco le había dejado hacer determinados nombramientos. Asimismo también habría facilitado que la directora de Comunicación y Participación, María Eizaguirre, se excediera en sus funciones y asumiera algunas de ellas en el Benidorm Fest. De hecho, el propio presidente ha llegado a reconocer esto último en privado. 

Sea como fuera, el futuro de la radiotelevisión pública en cuanto a audiencias no parece muy claro teniendo en cuenta que actualmente no pasa por su mejor momento ya que apenas firma un 8,3% en lo que llevamos de abril y habiendo llegado perder ya algún mes frente a laSexta de lunes a viernes. 

Hay que recordar que el Mundial de Qatar no se disputará hasta finales de noviembre por lo que por mucho que La 1 logre mejorar sus audiencias, corre el peligro de que sea insuficiente para que su media anual no caiga a su peor registro histórico, firmado en 2021 con un 8,8% de cuota.

[Más información: RTVE no renovará más 'Cuéntame cómo pasó': estudia despedirla con una temporada corta o tv-movie]