La famosa presentadora Ellen DeGeneres ha despedido este jueves su programa, The Ellen DeGeneres Show, tras 19 años de emisión en la cadena estadounidense NBC. La cómica ha puesto fin a dos décadas de éxito e influencia televisiva con un emotivo discurso en el que ha recordado sus inicios.
"Entré aquí hace 19 años y dije que este era el comienzo de una relación. Y hoy no es el final de una relación, más bien un descanso. Ustedes podrán ver otros programas y yo quizás me encuentre con otro público", afirmó.
Como es habitual en ella, en su despedida no faltaron las palabras de reivindicación hacia el colectivo LGTBI. "Cuando comencé este programa no podía decir 'gay', no estaba permitido, y lo decía mucho en casa. Tampoco podía decir 'nosotras' porque implicaba que estaba con alguien", expresó la presentadora, que en 1997 desveló públicamente que es homosexual.
"Por supuesto, no podía decir 'esposa', porque no era legal el matrimonio gay. Y ahora digo 'esposa' todo el rato", añadió DeGeneres, cuya mujer, Portia de Rossi, no faltó al cierre de su histórico programa. También estuvieron la actriz Jennifer Aniston, que fue la primera invitada de la historia del formato en su estreno en 2003, y las cantantes Billie Eilish y P!nk.
La cómica ya anunció el año pasado el final de su popular formato, cuya influencia llegó a todo el mundo gracias a invitados de primer nivel como Penélope Cruz, Britney Spears y el presidente de EE.UU., Joe Biden.
"Cuando eres una persona creativa, necesitas que te desafíen constantemente, y por muy bueno que sea este programa y tan divertido como es, ya no es un desafío para mí", explicó la presentadora al diario The Hollywood Reporter.
The Ellen DeGeneres Show ha sido nominado a los Emmy en 171 ocasiones (con 61 estatuillas conseguidas) y actualmente concentra una media de 2,5 millones de espectadores diarios, a los que hay que sumar quienes siguen sus contenidos virales en YouTube y otras plataformas internacionales.
A pesar de su indudable éxito, el formato acusaba una bajada de audiencia desde que en 2019 se hicieran públicos varios informes que detallaban un ambiente laboral tóxico en la producción del programa.
Después de que el diario digital BuzzFeed publicara un reportaje en el que antiguos empleados del programa acusaban al equipo de "racismo" y "cultura de trabajo tóxica", la imagen de DeGeneres quedó manchada y llegó a perder un millón de espectadores. La cómica, que el pasado verano pidió perdón a su equipo en una carta pública, ya quiso terminar su contrato en 2019, pero finalmente lo alargó hasta 2022, aunque ya no habrá más prórrogas.
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