Una reportera de Ya es mediodía ha vivido este viernes un momento de máxima tensión durante una conexión en directo en la que ha sido increpada y amenazada por una mujer, obligando a una compañera de Espejo Público a intervenir para evitar una agresión.
La periodista Marina Vidal se encontraba en la localidad vallisoletana de Santovenia de Pisuerga para informar en directo desde el lugar en el que un hombre mantenía secuestrados a dos rehenes en un piso tras matar a sangre fría a una persona y disparar contra un guardia civil.
Los familiares de los rehenes se agolpaban en el lugar de los hechos y el ambiente se iba caldeando cada vez más a medida que pasaba el tiempo. El secuestrador llevaba 12 horas atrincherado en la vivienda, mientras los nervios empezaban a apoderarse de los afectados, un caldo de cultivo que desembocó en la agresión que se vio en pleno directo en el programa de Telecinco.
Mientras los tertulianos del programa comentaban la noticia, en pantalla se veía a la reportera desde el lugar del suceso y de pronto un hombre se abalanzaba sobre la cámara del formato de Unicorn, mientras que una joven se acercaba a Marina Vidal con actitud agresiva. "¿Cuántas veces hay que deciros que no?", espetaba mientras la empujaba y agarraba el micrófono.
Mientras la reportera de Ya es mediodía se mostraba sorprendida y sin saber qué decir, la periodista Susana Ahijado, que trabaja para Espejo Público en Antena 3, intervenía para defender a su compañera de profesión. "Estamos haciendo nuestro trabajo, esta chica está haciendo un directo", decía mientras protegía a la reportera de Telecinco apartando a la agresora.
[Telecinco prepara ‘Ya es verano’ con Frank Blanco, Verónica Dulanto y Marta González Novo]
"¡Que no me levantes la mano!", advertía la espontánea, a lo que Ahijado respondía tajante: "Que no me la levantes tú a mí, que están haciendo un directo y no te están grabando".
En ese momento, la guardia civil intervenía para disolver el conflicto y se podía ver en pantalla a ambas reporteras siendo apartadas de los agresores por varios agentes de la Benemérita. "Estamos trabajando, estaba haciendo un directo", insistía la reportera de Espejo Público.