Belén Esteban ha reaparecido mediáticamente con una extensa entrevista en la que ha hablado de su duro proceso de recuperación tras romperse la pierna en directo en Sálvame, así como de otros asuntos como la relación con sus compañeros o la forma en que ha afectado al programa el testimonio de Rocío Carrasco.
Sobre este último asunto, la de Paracuellos asegura en la conversación con Semana que dar voz a la hija de Rocío Jurado en la docuserie Rocío, contar la verdad para seguir viva no ha sido positivo para el formato de La Fábrica de la Tele. "Está claro que nos ha perjudicado", expresa.
A pesar de ello, Belén añade que era necesario escuchar a Rocío porque hasta ahora "solo se conocía una versión". La colaboradora reitera su apoyo a la hija de 'La más grande', aunque no es un soporte sin fisuras, sino en su relato contra su exmarido, Antonio David Flores: "Antonio David me contó cosas que luego he visto que no eran ciertas, pero también hay cosas de ella [de Rocío Carrasco] que no me parecen bien".
La 'princesa del pueblo' ha querido desmentir que su alineación con Rocío Carrasco se deba a que esta le ha retirado la demanda por revelación de información privada. De hecho, Belén revela que esa demanda interpuesta en 2021 sigue vigente: "A mí no me ha quitado ninguna demanda", asevera. "Si ella considera que me tiene que demandar, lo respeto. Lo que no respeto es que a mí me han puesto verde porque supuestamente me había quitado la demanda y por eso le mostré mi apoyo y no es así", agrega la colaboradora.
Más allá de la crisis de audiencia que está sufriendo Sálvame y que, según las palabras de la Esteban, podría tener que ver con el protagonismo de Rocío Carrasco en el programa, Belén se muestra muy segura de la continuidad del espacio vespertino de Telecinco: "Ya te digo yo que va a continuar. Queda Sálvame para rato. Durante 13 años hemos sido líderes de audiencia y cada día seguimos luchando por continuar así", sentencia.