Este domingo, Ya es verano anunció que Gloria Camila Ortega es la tercera concursante confirmada de Pesadilla en el paraíso, y realizó una entrevista exclusiva a Julián Muñoz, entre otros contenidos. En su tramo final, el magacín de Telecinco emitió un reportaje sobre cómo el verano es aprovechado por muchas personas para hacer negocios ilegales, como pueda ser el vender fruta cortada por las playas.
Una práctica que, como indicaron, carece de todo tipo de control sanitario, pues los vasos que se distribuyen entre los turistas están guardados en un maletero de un coche a altas temperaturas. “Lo hacen con total libertad y sin ningún temor”, exponía la reportera Pepa Romero, desde Ibiza, donde siguió de cerca a varios de estos vendedores, que anuncian su producto como “la fruta del amor”. “Es un problema total, molestan a la gente y no tienen los permisos sanitarios adecuados”, explicaban varias personas, que ocultaban su identidad.
En un momento dado, Pepa se acercó al comerciante para preguntarle sobre las ventas que está haciendo, y he ahí cuando se volvió la situación más tensa. “No me grabes, vendo lo que me sale del capullo”, expresó el vendedor, con un tono muy agresivo. La periodista le preguntó por los productos que estaba vendiendo. “No la tengo en el maletero y no me grabes la fruta”, dijo, levantando la mano con intención de agredir. “Vale, vale”, decía la reportera, intentando calmar al vendedor ilegal. “A mí no me grabes, que no me has grabado, que eso es mentira”, insistía. Esta persona aseguraba que la policía les perseguía y les multaba. “¿Qué ilegal, vender un vaso de fruta es ilegal? Esto es venta ilegal, pero llevamos 20 años haciéndolo”, aclaraba, dejando claro que seguiría con su negocio.
En el plató, el periodista Alfonso Egea reflexionaba sobre el reportaje. “Lo de timar al turista es prácticamente lo de menos. Ibiza en particular, Baleares en general, supera el número de turistas que se pueden vigilar. Se habla de economía sumergida, ¿qué sumergida, si se está paseando por la playa?”, se preguntaba el comunicador. “Este tipo de compras puede llevar consecuencias graves para el consumidor”, apuntaba.
En un segundo bloque sobre venta ilegal, Pepa Romero recogió otros negocios ilegales que se llevan a cabo en Ibiza, como de cervezas, pareos y todo tipo de artículos. “Estamos intentar hablar con gente de hostelería de la playa, que prefiere no hablar porque tiene miedo a las represalias”, narró la reportera, que incluso demostró lo fácil que es comprar drogas delante de todo el mundo.