La sitcom, el género desterrado por las cadenas de televisión generalistas en España

No corren buenos tiempos para la comedia en televisión, al menos en España. Y es que, si hacemos un repaso por la programación de las diferentes cadenas de televisión generalistas o los estrenos que preparan para esta, la nueva temporada 2022/2023, volvemos a echar de menos un género que antaño consiguieron dar tantas alegrías en los ránkings de audiencias: la sitcom.

Antena 3 se encuentra volcada en grandes formatos de entretenimiento y en series dramáticas tanto nacionales como extranjeras (Hermanos, Infiel, Amar es para siempre y próximamente Heridas y Secretos de familia). Telecinco lo apuesta casi todo por los realities, los datings y los talents. Mientras que La 1 se decide por series históricas o de carácter más social (Cuéntame, HIT…). Ya de Cuatro y laSexta ni hablamos.

Las sitcoms reinaron con fuerza a finales de los 90 y principios de los 2000. Pero como todo, también la televisión evoluciona. Y hoy en día es complicado ver el género de la sitcom en nuestra televisión. Tan solo es Telecinco la que se atreve con la longeva La que se avecina y El Pueblo, aunque el trato que les profesa es bastante discutible.

['Aquí no hay quien viva' da el salto a Netflix y estará disponible a partir del próximo viernes]

Al emitirse primero por Amazon Prime Video, las temporadas de ambas series llegan al gran público bastante tarde y eso se ha notado en los últimos índices de audiencia, donde ambas han logrado temporadas en mínimos. En un medio donde todo pasa tan rápido, esperar tanto tiempo para estrenar nuevos capítulos hunde el rendimiento de las series en su emisión en abierto.

Pero, el debate podría ser otro: ¿No se hacen ya buenas sitcoms en España? ¿O es el público el que ha cambiado de gustos y prefiere ver el drama en prime time? En el pasado, en nuestro país se emitieron grandes sitcoms que, de una manera u otra, han marcado el género y las futuras ficciones que se han llevado a cabo. Aída, Con el culo al aire, Siete vidas, Los Serrano, Allí Abajo, Anclados, El chiringuito de Pepe, Casi perfectos… y cómo no, auténticas joyas televisivas como Aquí no hay quien viva o más antiguas como Pepa y Pepe o La casa de los líos, por solo citar algunas de las más reconocidas.

Una larga lista de fracasos en los últimos años

'Cheers'.

Un género, el de la sitcom, que nació en EEUU en los años 60 y que rápidamente fue exportado a otros países. Hoy en día continúa siendo pieza fundamental en la programación de muchas cadenas de televisión internacionales y también en plataformas y cadenas de pago, como ocurre aquí en España con series multipremiadas como Vota Juan.

Series que, al menos en su concepción inicial, duraban entre media hora y 50 minutos -aunque las españolas con el objetivo de hacerlas más rentables en su pase por televisión, han llegado a tener más de 90 minutos de duración-. Y donde la acción que se narra es autoconclusiva, es decir, presentan historias que comienzan y finalizan dentro del mismo capítulo. Incluyendo una trama principal y tramas secundarias y paralelas, saltando de una a otra, y con el humor como el principal aliciente.

Es entendible la postura de las diferentes cadenas en España en cuanto a las sitcoms ya que, desde hace años, ninguna engancha al espectador, como sí lo hacen las series de corte más dramático o histórico. Entre los últimos grandes fracasos, series como Benidorm, Cheers, Aquí paz y aquí gloria, Bienvenidos al Lolita, Vida Loca, A ver si llego, Stamos Okupa2 y un largo etcétera. Incluso series de gran calidad como Señoras del (H)ampa que pese a empezar con buenos datos, terminó saliendo de la parrilla por la puerta de atrás -aquí Telecinco tuvo bastante la culpa-

Si revisamos los planes en ficción de las diferentes cadenas, vislumbramos pocas sitcoms pendientes de estreno o en preproducción. Solo Antena 3 tiene ya grabadas dos, Señor, dame paciencia o la desaparecida Deudas con Carmen Maura, que por uno u otro motivo no se atreve ni a promocionar y ni a emitir. ¿Por qué las sitcom españolas parece que ya no interesan a la audiencia? El público, como siempre, tiene la última palabra.