La revelación el pasado lunes que hizo Kiko Hernández durante el programa de En el nombre de Rocío sobre el manuscrito oculto de Rocío Jurado sobre Ortega Cano en el que se hablaba de un supuesto maltrato físico ("Son las ocho de la mañana y ya me ha dado la primera hostia") sigue dando que hablar.
Este martes, tratabatrataba el asunto y la propia Ana Rosa Quintana comentaba que "son cosas que se tienen que dilucidar en los juzgados y no en los platos de televisión. Es mi opinión personal".
Fue entonces cuando Lequio, enemigo declarado de Carrasco, quiso dar su opinión sobre el asunto. "Según voy escuchado a Rocío, cada vez entiendo menos los años de buen rollo. Si ella era consciente de todo lo que está diciendo, no se entiende que después de muerta su madre mantuviera la relación".
"Probablemente no has visto el programa", le espetaba entonces Paloma García Pelayo. "Desde luego que no. No soy tan masoquista para ver ese programa. Lo que veo son los resúmenes", le decía el italiano, antes de que Ana Rosa parase el debate entre ambos.
Esta no es la primera vez que Lequio ataca a Carrasco. Ya en marzo de 2021, tras la emisión de la docuserie Rocío, contar la verdad para seguir viva, el italiano cuestionaba el testimonio de la hija de Rocío Jurado. "Es una mujer que no ha sabido sobreponerse a los golpes del destino. No puede ser que, en esta historia, todos sean malos menos Fidel".
"Creo que Lequio no ha entendido nada de lo que he contado. Debe ser que él es bastante parecido al ser (Antonio David) y, claro, perro no come perro”, dijo en su momento Rocío Carrasco, sabia y prudente, dando a entender que los dos tenían comportamientos similares y que por eso se defendían mutuamente.
Unas palabras que sirvieron para que en redes sociales se rescataran unas viejas declaraciones que dio el ex de Ana Obregón en Tómbola, en la que en un momento dado se le pregunta que si él no le pega “a las mujeres”. El italiano, muy calmado, respondía que él ha “tirado bofetones a las mujeres. Me ha pasado, pero es un bofetón light”.
“No estoy hablando de violencia, estoy hablando de una discusión en la que ella te tira un bofetón y tú se lo restituyes” explicaba, añadiendo que “no haya nada mal” en un hecho de estas características.
Tirando de archivo, podemos remontarnos al año 2001 para recordar que Antonia Dell’atte, primera mujer de Lecquio, ya denunció en un programa de televisión que sufrió violencia machista durante su matrimonio. Fue en Gente, en Televisión Española, y dijo entonces: “Yo he vivido tres años y medio casada con él, de malos tratos físicos y psíquicos. Y me siento en el deber de hacer esa llamada a todas las mujeres que han sufrido malos tratos, que los denuncien”.
Lecquio denunció por calumnias a su ex, pero en 2004 la justicia señaló que Antonia había dicho la verdad. Entre otras pruebas, se aportó pruebas como una denuncia que presentó en 1991 en la comisaría de Chamberí, donde le acusa de malos tratos físicos y psíquicos y unas cartas que le mandó el propio Lequio, donde reconoce haberle maltratado y le pedía perdón.