Tres años después de haber pactado su salida con Mediaset Italia, Paolo Vasile, CEO de Mediaset España, confirmaba a EL ESPAÑOL-Invertia que abandonaría el grupo de comunicación en las próximas fechas después de que se filtrara que había sido cesado de su cargo en el grupo televisivo. 

"Las audiencias son cíclicas y no tienen nada que ver con mi salida. Le prometí a mi mujer que al cumplir los 67 años volvería a Italia. En 2019 había pactado con Mediaset abandonar el grupo al año siguiente. Termino el ejercicio, que será estupendo, cierro la cuenta y me voy. Creo que me mantendré hasta febrero o marzo", explicaba. 

Se abre así un periodo de incertidumbre sobre el futuro del grupo. ¿Quién será el nuevo consejero delegado? ¿Habrá continuidad o se apostará por un nuevo perfil? ¿Habrá más cambios en el organigrama? ¿Qué pasará con las productoras participadas? Y lo más importante para el espectador: ¿habrá cambios en la parrilla?

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Aún es pronto para dar respuesta a esa última pregunta. Pero, todo hace indicar que, dada la crisis de audiencias por la que atraviesa el grupo y, principalmente, Telecinco, una reforma de 180 grados se antoja vital para intentar recuperar el liderazgo perdido. 

Y en esa reforma, si lo que se busca es un nuevo modelo de televisión donde prime la variedad, es inevitable pensar en que Mediaset España tendrá que empezar a trabajar con otras productoras más allá de las participadas (La Fábrica de la Tele, Unicorn Content). 

Solo así podrá optar a hacer otro tipo de formatos, como así ocurre con su rival Atresmedia, que trabaja prácticamente con todas las productoras de este país y que durante los últimos años ha decidido adquirir grandes formatos internacionales como Mask Singer, La Voz, Password, ¿Quién quiere ser millonario?, El Club del 1% y The Wheel.

Y, obviamente, para dar espacio a estos nuevos formatos habrá que hacer hueco en su parrilla. Por lo que, salvo programas asentados como El programa de Ana Rosa, Supervivientes o Got Talent, todos los demás programas podrían correr peligro. Desde Sálvame hasta el Deluxe, pasando por realities como Secret Story.

También pueden correr peligro caras con perfiles muy marcados como el de Jorge Javier Vázquez, quien podría ver cómo se reduce su presencia en pantalla, y que a la par se apueste por rostros más 'amables' para el espectador como el de Lara Álvarez, o nuevos procedentes de la competencia.

Inflencia política

Pero, además, teniendo en cuenta que estamos ante un año electoral, el nuevo presidente de Mediaset España, Borja Prado, tiene claro que el grupo de comunicación tiene que ganar influencia política. Y para ello tendrá que apostar por contenidos menos polémicos y por sus informativos.

En este sentido, el grupo con sede en Fuencarral tendrá que hacer una fuerte apuesta por sus servicios informativos después de que perdieran el liderazgo hace ya más de dos años en favor de Antena 3 Noticias y tras más de dieciséis años con el mismo plató. 

Y no sólo tendrá que renovar el decorado, también sus caras aprovechando que Pedro Piqueras está ya en edad de jubilación. Y ahí, a nadie se le escapa que durante los últimos meses el grupo ha estado apostando fuertemente por el periodista Diego Losada. 

Tal y como está haciendo ahora la de Atresmedia con Y ahora Sonsoles, Mediaset España tendría que haber empezado a hacer cambios en su modelo cuando éste lideraba sin problemas frente a sus rivales. Sin embargo, la visión cortoplacista de Paolo Vasile ha sido la que ha terminado la propia tumba del modelo.

El reto no será nada fácil ya que, por ejemplo, a Antena 3 le ha costado diez años que su modelo de televisión haya conseguido el liderazgo. Pero, además, ahora hay muchos más agentes en el sector con las plataformas robando cada vez más público a las generalistas y con La 1 también iniciando su cambio de modelo.