Era cuestión de tiempo que el fichaje de José Antonio Avilés en Sálvame levantase alguna ampolla entre sus compañeros. El falso periodista parece no mantener jamás su propósito de enmienda, y este jueves fue señalado por el reportero Sergi Ferré por llevar a cabo actitudes poco éticas. “Avilés ha vuelto a mentir y ha vuelto a cometer un delito”, explicaba Sergi, algo que provocó que el andaluz se levantase de su asiento y se fuese del plató. “He avisado de que si se utilizaban ciertas palabras, yo me iba”, decía Avilés, quien parece haber puesto como condición que no se le señale más veces como mentiroso o como culpable de cometer acciones en contra de la ley.
Poco después, Avilés regresaba, y entonces Sergi Ferré explicaba lo que Avilés habría hecho mal. Según su relato, José Antonio estaría llevando a cabo una suplantación de identidad en aplicaciones para ligar, mandando fotografías que no son suyas, y que a través de las mismas habría entablado conversación con un amigo de Sergi.
Al parecer, Avilés se abrió un perfil y habló con un amigo de Sergi que es de Córdoba. Y le habría escrito en varias ocasiones en un perfil sin foto, pero sí habría mandado dos imágenes suyas. Más tarde, todo apunta a que Avilés se quitó la aplicación, y al volver a instalarla, le volvió a escribir a la misma persona, sin recordar haberlo hecho antes, y mandó fotografías de otra persona. Y también hizo lo mismo una tercera vez, y se hizo pasar por una tercera persona. A través de esas aplicaciones, José Antonio se habría inventado una nueva vida.
“Dice que es traumatólogo y tiene un paciente que es un torero muy conocido de Córdoba”, aseguró Sergi Ferré, y detallando que habían localizado a uno de los chicos cuyas fotos usaba Avilés para hacerse pasar por ellos. ““Le dijo a mi amigo que, si quería ir a su casa a dormir, que él duerme en ropa interior, que hacían la cucharita y si le daba morbo le podía recibir con la bata de traumatólogo”, añadía.
En su línea habitual, José Antonio Avilés negaba todas las acusaciones. “No he suplantado a dos chicos”, se justificaba, mientras que el reportero le decía que era un delincuente por suplantar identidades. “Al final el delincuente a lo mejor vas a ser tú”, terminaba diciendo Avilés, que solo gritaba intentando desacreditar a su compañero, mientras que lo acusaba de querer una de las codiciadas silla de Sálvame.