Salvados ha destapado este domingo 30 de octubre la cara más desconocida de Amazon. El episodio titulado 'El dilema de Amazon' ha sacado a relucir las duras condiciones a las que se enfrentan los trabajadores del gigante del comercio, algunos de los cuales han ofrecido su testimonio al programa presentado por Gonzo.
Entre los aspectos que han denunciado los empleados y extrabajadores de la plataforma, uno de los más recurrentes ha sido el de los problemas de salud derivados del trabajo en los centros logísticos de la compañía. Así, varios entrevistados han desvelado que son frecuentes las visitas a la enfermería por lesiones derivadas de las tareas diarias, aunque los problemas de salud mental son menos visibles pero igual de comunes.
"Las bajas por este motivo son innumerables", comenta Pedro Antonio. Por su parte, Anna Ramón ha relatado cómo afectan las condiciones al ánimo de los empleados. "Recuerdo una conversación con la mánager de la mañana y uno de nuestros jefes. Ella dijo: 'Yo me voy al baño a llorar unas dos o tres veces por semana'", una situación que es todavía más preocupante teniendo en cuenta que la empresa tiene implantada la jornada laboral de cuatro días.
Pese a las abusivas condiciones a las que se enfrentan los trabajadores, llama la atención la escasez de comités que defiendan los derechos de los empleados de Amazon. Esto, según Alfonso Domínguez, se debe al temor a las represalias que pueda haber por parte de la empresa.
Daniel Alexis y su padre, Pedro Antonio, conocen bien las consecuencias de defender sus derechos frente a la compañía. Ambos narraron al espacio de laSexta cómo la empresa les abrió expediente cuando intentaron implantar un comité en el centro logístico de Sevilla en el que trabajaban.
"No me dijeron el motivo. Firmé que no estaba conforme y salí escoltado", explica Daniel, que desvela que este conflicto aún se está "discutiendo judicialmente". Pedro, por su parte, define el funcionamiento de la empresa como "terror psicológico".
Los proveedores que sirven a Amazon también sufren esas duras condiciones. La desaparición de productos enviados o las devoluciones erróneas son sólo algunos de los problemas a los que se enfrentan las empresas que trabajan para el gigante del comercio online.
"Una vez me faltaron 50.000 unidades de un cepillo eléctrico y ellos dijeron que no les habían llegado", explica Luis Cerrillo, que perdió una gran cantidad de dinero por ese pedido que Amazon asegura que nunca llegó, aunque él afirma tener pruebas que demuestran que fue enviado.
Además, la plataforma tiene una deficiente política de devoluciones en la que prácticamente no existe filtro, por lo que los proveedores acaban asumiendo las pérdidas por productos devueltos en mal estado, ya que Amazon no se hace responsable.
Estos son algunos de los aspectos que Salvados ha destapado en un valiente reportaje en prime time que, teniendo en cuenta el poder mediático y económico de la plataforma, otorga todavía más mérito a laSexta por denunciar las condiciones laborales de una compañía que es un potencial anunciante para la cadena y su grupo, Atresmedia Televisión.