Café con aroma de mujer es ya oficialmente el último intento frustrado de Telecinco por hacer frente a Antena 3 en la franja de tarde. La cadena de Mediaset no sólo puso a la serie protagonizada por William Levy a pelear contra Pasapalabra, sino que además restó una hora a Sálvame Naranja, su oferta más competitiva de la tarde, para emitir la ficción de 19:15 a 21:00 horas.
Tras demostrarse que la ficción de Netflix no ha sido capaz de hacer frente a Y ahora, Sonsoles ni mucho menos al concurso presentado por Roberto Leal, Telecinco ha decidido hacer un movimiento recortando la duración de la serie y devolviendo a Sálvame Naranja los 45 minutos que le había quitado.
A partir de este martes 8 de noviembre, Café con aroma de mujer ha pasado a emitirse a partir de las 20:00 horas, compitiendo directamente con Pasapalabra. La estrategia de Mediaset supone claramente una rendición al enfrentar a la ficción contra el programa más visto de la tarde, por lo que la gran pregunta es hasta cuándo va la cadena a estirar un producto que claramente le está perjudicando y que, además, está causando estragos en el formato al que precede, Informativos Telecinco.
Desde el estreno de Y ahora, Sonsoles el 24 de octubre hasta el martes 1 de noviembre, el informativo de Pedro Piqueras anotó una media de 1.415.000 espectadores y un 11% de share, un dato que se sitúa en la línea de la media que el espacio firmó en el mes (10,7% y 1.339.000 espectadores).
Sin embargo, la situación ha cambiado notablemente a raíz del estreno de la telenovela en las tardes de la cadena de Mediaset. Y es que entre el miércoles 2 de noviembre -día que arrancó la serie- y el lunes 7 de noviembre Informativos Telecinco ha caído hasta el 8,7% de cuota con apenas 1.179.000 espectadores. Se sitúa, por tanto, por debajo del 10% y a punto de no alcanzar la barrera psicológica del millón.
'Café con aroma de mujer' está lastrando las tardes de Telecinco.
Lo más preocupante de la situación es que los datos parecen no haber tocado fondo y presentan una tendencia descendente que, de no aplicarse cambios en parrilla en los próximos días, podría suponer un nuevo disgusto para unos informativos que están muy cerca de perder la segunda posición ante el Telediario de TVE, que en octubre se quedó a dos décimas de dar el sorpaso.
Entretanto, Café con aroma de mujer sigue en caída libre en Telecinco y este lunes 7 de noviembre firmaba un 7,1% y 792.000 espectadores, cifras muy inferiores a las que conseguían Sálvame Naranja y Sálvame Sandía en su misma franja.
En este contexto, resulta inexplicable la falta de capacidad de reacción de Mediaset, que tras una semana ha decidido dar por perdida la batalla y acortar la emisión de la telenovela en las tardes de Telecinco, pero a su vez sigue manteniéndola con datos inasumibles en la franja de 20 a 21 horas.
Cabe recordar en este punto el caso de Pasión de Gavilanes. La telenovela se desinfló en el prime time de Telecinco tras un estreno correcto y, para intentar darle una segunda vida, la cadena optó por emitir reposiciones en su sobremesa. Tras sólo tres días y ante los discretos datos de audiencia, Mediaset reculó y eliminó la ficción de sus tardes.
El principal problema para la compañía es la falta de alternativas para sustituir a la serie en caso de cancelarla o cambiarla de horario. A la espera de poder estrenar alguno de los nuevos formatos que está preparando, como los concursos 25 palabras y Reacción en cadena, apartar Café con aroma de mujer implicaría volver a tener que ocupar cinco horas de su parrilla diaria con Sálvame, una duración que lastra el dato diario de la cadena.
Aunque esa no sería la solución ideal, lo cierto es que sí es la más idónea para frenar la sangría de audiencia y ganar tiempo mientras la cadena traza una nueva estrategia para mejorar sus tardes y tratar de competir contra Antena 3.