Este martes, Viajando con Chester tuvo como uno de sus protagonistas a Máximo Huerta, escritor y presentador que charló con Risto Mejide desde el castillo de Buñol, en Valencia. Una vez más, Máximo recordó su breve etapa como ministro de Cultura y Deportes y cómo fue su dimisión. “Algunos dentro del PSOE siempre dijeron que era una estrategia preparada por los Hombres del Presidente para coger a alguien muy llamativo y hacerlo dimitir”, aseguró el invitado.
Del mismo modo, recordó cómo no recibió ningún apoyo público por parte del ejecutivo. “Me dolió ver cómo defendieron todos a Pedro Duque y a mí no me llamó nadie después de lo que pasó”, añadió, en referencia a las críticas que recibió por ser un profesional habitual en los medios de comunicación, y por los tuits personales de su pasado que se rescataron tras su nombramiento. Como aquel en el que escribió que “odiaba el deporte”, y que justificó como un tuit inocente tras una sesión de entrenamiento en la que terminó mareado.
Sin embargo, lo más llamativo de su paso por Viajando con Chester fue el momento en el que le contó a Risto Mejide que después de haber dimitido como ministro, Pedro Sáchez le “ofreció un cargo en el Instituto Cervantes”. “Yo le dije que ni debió ofrecérmelo, ni yo debía aceptarlo después de todo el revuelo que había habido. Habría sido muy bonito porque era mi sueño. Pero tenía tanto pánico a la prensa y a los medios digitales que no podría haber soportado esa presión”, dijo al respecto.
Por otro lado, Máximo recordó como “un día de tensión e ilusión” aquel en el que se anunció su nombre como ministro. Daba la casualidad de que todos los demás nombramientos se habían filtrado, excepto en el suyo, y no sabía cómo iba a ser recibido. Y aprovechó la ocasión para dar las gracias al Rey Felipe VI por un gesto que tuvo con él, pues sabía bien “cómo la prensa trata a los que vienen de la prensa”.