Este miércoles 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, una fecha señalada en la lucha contra la violencia machista y la concienciación feminista en todos los ámbitos de nuestro país. Como no podía ser de otra forma, la televisión se ha comprometido con este día adaptando sus contenidos a la celebración.
La realidad es que más allá de este día concreto, Mediaset España, uno de los grupos audiovisuales generalistas más importantes del país, no ha dudado en incluir en su programación varios espacios donde se ha tratado la violencia machista y el feminismo de manera prolongada. Sobre todo después de la emisión de la docuserie de Rocío Carrasco, que ha conllevado un cambio en el discurso de muchos programas, sobre todo de Sálvame.
Corría el año 2019 cuando buena parte de la audiencia no entendía el nuevo rumbo que había tomado el programa presentado por Jorge Javier Vázquez con su nueva sección, Con M de mujer. Un espacio feminista donde Geles Hornedo acompañada de Carlota Corredera, presentadora por aquel entonces de Sálvame, analizaban comentarios y comportamientos machistas que habían tenido los colaboradores a lo largo del programa.
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Un espacio donde, además, se introducían conceptos novedosos para la audiencia del programa de Telecinco, como patriarcado, micromachismo o lucha feminista. Reflexiones y análisis que nunca antes habían formado parte de un programa de entretenimiento de máxima audiencia, y menos de uno como Sálvame.
Una sección que terminó por entrar de lleno en el programa, concienciando a la mayoría de los colaboradores, y es que si la televisión es un reflejo de la sociedad, Sálvame no podía ser menos. Los colaboradores debían 'reeducarse' y asumir discursos machistas muy afianzados y aprobados en televisión hasta ese momento.
Algo que no dudó en hacer cada tarde Carlota Corredera, provocando sonados enfrentamientos con algunos de sus compañeros. "¿Si es la mujer la que controla a su pareja es violencia de género?", se preguntaba Antonio Montero en diciembre de 2020. "Ay de verdad, Antonio, es que me niego. Me desespera que llevemos un año con Con M de mujer y que parezca que algunos de los compañeros predicamos en el desierto", replicaba Corredera. "Cuando una mujer controla a su pareja, esa pareja no acaba muerta, ¿vale? ¿Vale? ¿O no vale? ¿No lo conseguimos entender?", insistía Carlota.
A pesar del final de la sección, la colaboradora no dudaba cada tarde en afear comentarios o conductas machistas de los colaboradores. Sus principales encontronazos fueron con Kiko Matamoros, Rafa Mora o Antonio Montero. Y es que fue de nuevo con el paparazzi con quien tuvo uno de los enfrentamientos más sonados de la historia de Sálvame, después de que el fotógrafo calificara a Rocío Carrasco de "mala madre".
"Se acabó, esto no es un juego", pronunciaba la gallega después obligar a Antonio Montero a abandonar el plató. La presentadora no sólo se estaba convirtiendo en la figura televisiva que más férreamente defendía a la hija de Rocío Jurado, sino que además ya se encontraba entre los máximos exponentes del feminismo en Mediaset.
Además, pocos días antes, Corredera aseguró en Viernes Deluxe que tenía "agujetas de luchar contra el patriarcado", una batalla que la llevó a enfrentarse contra todo aquel que difundía actitudes machistas en los programas que presentaba.
Rocío Carrasco, un antes y un después
El pasado 2021 comenzaba una nueva etapa en televisión marcada por el estreno de la serie documental de Rocío Carrasco, Rocío. Contar la verdad para seguir viva, en la que Rocío Carrasco hablaría después de "25 años de mentiras y silencio" y abordaría su relación con Antonio David Flores.
La tanda de capítulos creó toda una revolución en Mediaset siendo incluso objeto de debate político en nuestro país y, como no podía ser de otra forma, cambiando por completo el discurso sobre ella, sobre todo en Sálvame, donde trabajaba Antonio David. Además, se puso el foco en conceptos nuevos para la audiencia del programa, como 'violencia vicaria' o 'luz de gas'.
Incluso Irene Montero llegó a entrar en el programa de Telecinco en directo para hablar sobre este asunto. "Tanto el testimonio de Rocío Carrasco como la audiencia justifican que es una obligación que el ministerio de Igualdad esté ahí", comentaba la Ministra en directo. "Hay miles de mujeres que anoche y en los siguientes capítulos pueden sentirse identificadas o verse reflejadas en algunas de las experiencias", añadía.
Desde que Carrasco se convirtiera en un icono feminista en la cadena, Sálvame cambió por completo. Los discursos, el intento de promover una perspectiva de género en cada noticia o la difusión de discursos a favor de la igualdad se han convertido en una constante en el espacio de La Fábrica de la tele.
Carlota Corredera dejaba su puesto como presentadora del programa hace casi un año, y es que tal y como ella aseguró, presentar Rocío, contar la verdad para seguir viva, le ha "perjudicado".
Pero la última novedad saltaba hace varias semanas, cuando la nueva cúpula de Mediaset incluía a Rocío Carrasco en la lista de vetados de la cadena, no pudiendo hacer referencia a la hija de Rocío Jurado en ningún momento, tampoco emitir imágenes suyas.
La huella permanece
Sin embargo, la huella permanece y no es raro ver a Jorge Javier Vázquez, María Patiño, Gema López o Terelu Campos afear comentarios a sus compañeros y calificarlos de machistas. Un comportamiento que quizás, hace una década era imposible presenciar.
Los colaboradores han evolucionado a la vez que lo ha hecho la sociedad española, pero sobre todo con el impulso de espacios como aquel Con M de mujer o la desgarradora historia de Rocío Carrasco.
Todavía se siguen produciendo comentarios y comportamientos machistas y sexistas en el seno del programa, pero quizás antes pasaban desapercibidos y ahora son expuestos. Un avance que debería continuar, algo que depende exclusivamente de aquellos que rellenan cada tarde tres horas en directo.