Los programas de corazón y las mesas de actualidad dedicada al mundo del famoseo de los diferentes espacios de este miércoles 5 de abril han tratado con mayor o menor profundidad la primera entrevista que ha dado Ana Obregón tras el nacimiento de la hija de Aless Lecquio por gestación subrogada.
Así, en El programa de Ana Rosa, además de desglosar las declaraciones, la periodista Marisa Martín Blázquez ya detalló que la revista ¡Hola! habría pactado “un pack” de noticias con Ana Obregón que se irán desvelando las próximas semanas. Y apuntó que, por las mismas, habría recibido una cantidad “indecente” de dinero. “Parte de ese dinero irá donado a la Fundación Aless Lecquio. Esta niña va a llegar aquí como hija adoptada por Ana Obregón. Allí figura como su madre, pero aquí lo hará como su abuela. Ha habido un asesoramiento brutal a nivel jurídico para que no hubiera ningún resquicio legal a la hora de hacer esto”, explicaban.
Pocas horas después, en Sálvame, Antonio Montero, esposo de Marisa, daba más detalles, y cifraba en un millón de euros ese lote de noticias. Una cantidad que resulta llamativa en un momento en el que las noticias del corazón no se pagan como antaño.
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Eso sirvió para que se pusiese sobre la mesa la posibilidad de que la portada de la semana pasada, en la que se veía a Ana saliendo de un hospital con la pequeña Ana Sandra en brazos, fuese algo pactado y no un robado. “No hay nada de malo de hacer una exclusiva, pero que no nos engañen”, reclamaba Kiko Hernández. El colaborador recordaba que Ana contaba en Instagram que les habrían pillado, pero a su vez, promocionaba la revista ¡Hola!, y no encajaría un hipotético enfado con esa mención a la publicación. “Enfadada no ha estado nunca”, valoraba Terelu Campos. “Porque estaba todo pactado”, añadía Kiko Hernández.
Del mismo modo, los colaboradores se han preguntado si ese dinero de las exclusivas se donaría, y detallaron que Ana Obregón habló de donar los beneficios del libro de Aless, pero no se ha pronunciado sobre las entrevistas. “Fue la precursora de que se pixelaran las fotos de menores. Pero todo lo que está contando de esa niña quedará para la posteridad”, añadía Kiko Hernández.