Sálvame arrancó esta semana informando sobre todo lo que está sucediendo en la Feria de Abril de Sevilla, y por ello el reportero Omar Suárez se trasladó hasta la capital hispalense. En su conexión en directo aseguraba que, en principio, iba a narrar cómo los famosos se divertían en esta fiesta, pero que el programa ha recibido una noticia impactante que provocó un cambio de planes.
“Yo venía informaros de los famosos de la feria, pero ha ocurrido esto que es tan noticiable que evidentemente es de lo que vamos a hablar en el programa. Estamos hablando de un hecho que ha provocado muchísima tensión, porque hay muchas personas famosas a las que se ha visto salpicadas. Estamos hablando de una famosa, muy famosa, muy conocida por todos, que es la implicada en un hecho en el que ha intervenido la Policía Judicial”, revelaba el reportero.
En teoría, nadie, salvo Kiko Matamoros, sabría la identidad de esa persona. Se trataría de alguien de cuya economía, de sus deudas en concreto, ya se habría hablado con anterioridad. Y todo esto se habría sabido por alguien a quien etiquetaron de “fuente chivata”, y cuya identidad también se destaparía.
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Todo esto sucedió en Sálvame Limón, y no fue hasta el tramo final de Sálvame Naranja cuando se recuperó el hilo. Y se destapó que la persona implicada habría sido Raquel Bollo. Según el programa, la Policía Judicial habría entrado en la nave industrial que tiene a 10 kilómetros de Sevilla capital, donde desarrolla su negocio de costura flamenca, y se habrían llevado los trajes por impagos a Hacienda. Esto “había dejado a numerosos famosos sin vestuario que ponerse para sus próximos eventos, porque no olvidemos que además de la feria está a punto de comenzar la temporada de bodas bautizos y comuniones, todo un drama en el universo VIP”, detallaban. Sálvame, además, mostró imágenes de Raquel Bollo del viernes por la noche, solo unas horas después de que hubiese pasado esta “delicadísima situación”.
En el plató, Belén Esteban decía que no le parecía bien que hubiesen embargado los trajes a Raquel Bollo, mientras que Kiko Matamoros le respondía que solo le parece bien que le embarguen a él su casa. “Esto es una cadena que todos dependen de todos y si tú no cumples con tus pagos, pues me parece muy mal por parte de Raquel”, valoraba Frigenti.
María Patiño entonces preguntaba si el problema es que Raquel no ha cumplido con una serie de encargos para ferias y romerías, pero Omar Súarez le corregía. “El problema es que en todas estas personas que tenían un encargo se quedan sin el encargo, porque según nos cuenta esta fuente la Policía Judicial interviene y se lleva todos esos trajes de flamenca. Por eso hay muchos a famosas afectadas”, detallaba. Se suponía que, al cerrar el tema, desvelarían también quién era esa “fuente chivata” que destapó todo esto de Raquel Bollo. Sin embargo, no lo hicieron. “De momento ese nombre se va a guardar, para que esa persona se ponga en contacto con el programa y dé la cara y cuente por qué lo considera noticiable”, finalizaba el reportero.