Caprichos del destino (o no), con el adiós de Sálvame, el programa más emblemático y representativo de la etapa de Paolo Vasile al frente de Mediaset España, se pondrá fin el próximo viernes 23 de junio a la era del italiano justamente en el día en el que celebra su 70 cumpleaños.

Y es que el programa de La Fábrica de la Tele cambió para siempre aquella Telecinco a la que se le bautizó como la cadena amiga para pasar a ser una televisión polémica, pero muy rentable. Todo en la principal cadena de Mediaset España se 'salvamizó' con el visto bueno del romano. 

Y eso que allá por el año 2009 fue él quién decidió 'matar' al padre de Sálvame, el mítico Aquí hay tomate. Entonces, después de que la cadena cayera cuatro puntos respecto al año anterior pasando de un 19% a un 15%, Vasile decidió dar un giro en la programación.

[De 'Gran Hermano a 'Sálvame': polémica y rentabilidad, las palabras que definen a Paolo Vasile]

"Hay un ciclo de programaciones que se ha agotado y no sólo afecta a Telecinco, sino a otras cadenas. El corazón agresivo ha muerto, hay dificultad en conseguir cuotas altas con magacines en la tarde… Se está confirmando un problema no de rejilla, sino de un cambio de gusto y las consecuencias del cambio de ese gusto. Hemos dado tantas cadenas los mismos contenidos que hemos completado el hambre de la audiencia por determinados géneros", reflexionaba.

Fue entonces cuando, al igual que está pasando ahora, decidió estrenar una docena de nuevos formatos entre los que se encontraban Las gafas de Angelino, ¿Xq no te callas?, La tribu, La guerra de los sesos, G-20, El Topo, La séptima silla o De buena ley. Solo este último consiguió mantenerse en la parrilla.

Ante este fracaso en la estrategia, Vasile recuperó el corazón más agresivo de Aquí no hay tomate con un nuevo espacio que llevaba por título Sálvame. El programa, que empezó como un debate nocturno de Supervivientes, pasó a ser un espacio diario que se convirtió no solo en pilar fundamental de la parrilla sino que impregnó todo el modelo.

"El primer operador que acierte mediante un producto novedoso recuperará rápidamente sus índices de audiencia", había dicho el propio Vasile. Y vaya si lo hizo. El espacio de La Fábrica de la Tele llevó nuevamente en volandas a Telecinco a un liderazgo que empezó a perder justo cuando ese mismo programa comenzó a dar síntomas de desgaste.

Un modelo que por mucho que ahora haya quien quiera denostarlo, incluso dentro de la propia Mediaset, "se revisará en el futuro", según contaba el propio Vasile este pasado fin de semana en EL ESPAÑOL. "Ha sido un movimiento popular. Suele pasar: algunas cosas son minusvaloradas en el presente y adquieren importancia con el tiempo". 

Una nueva etapa

De momento, los primeros datos de Mía es la venganza, la serie que ha sustituido a Sálvame Limón no han sido nada halagüeños. Después de su estreno el pasado lunes, cuando firmó un 9,7% de share y 1.007.000 espectadores, la serie ha ido cayendo día a día hasta firmar un 8,9% de media en su primera semana.

En comparación con los datos del programa de La Fábrica de la Tele la semana anterior, Telecinco cae 1,1 puntos ya que el magacín promedió un 10% de cuota de pantalla. Esto ha hecho que la cadena de Mediaset España quede por detrás de La 1 (La Promesa) y Antena 3 (Amar es para siempre), según datos de Dos30'.

Habrá que ver qué ocurre a partir del próximo lunes 26 de junio con la llegada de Así es la vida, el nuevo magacín de la cadena producido por Cuarzo Producciones y presentado por Sandra Barneda y César Muñoz.

No lo tendrá fácil. Sálvame Naranja ha sido el único programa que ha  rebasado el millón de espectadores y el doble dígito. Ni 25 palabras ni Reacción en cadena lo consiguen. El magacín de La Fábrica de la tele viene cosechando unos buenos datos de audiencia en los últimos días.