La bomba llegaba a mediados del pasado mes de febrero. Para romper con el pasado, Mediaset España decidía vetar a más de una docena de personajes que no podían ser nombrados ni referenciados de ninguna maneraen los distintos programas de la casa.

Esta 'lista negra' se incluían nombres como los de Rocío Carrasco, Fidel Albiac, Antonio David, Rocío Flores, Kiko Rivera, Olga Moreno, Marta Riesco, Gloria Camila, José Fernando, José Ortega Cano, Rosa Benito y Rosario Mohedano, entre otros.

Un veto que parece que ha llegado al final en el caso de Kiko Rivera. Y es que tanto El programa de Ana Rosa como Así es la vida ha decidido volver a hablar del hijo de Isabel Pantoja para poder informar largo y tendido de la operación de corazón a la que se ha visto sometido el deejay.

[El terrible error de estrategia de imagen que comete Mediaset España con su nuevo Código Ético]

Y decimos largo y tendido porque el magacín matinal de Telecinco dedicó gran parte de su emisión de este lunes para hablar del comunicado que había publicado Rivera en redes sociales. "Hoy es un día importante para mi vida, hoy salimos de dudas con el cateterismo. Una parte de mi corazón no funciona en condiciones, pero no se alarmen todavía sigo vivo y con ganas de vivir", escribía el andaluz en redes sociales.

Asimismo, ya por la tarde, el formato presento por Sandra Barneda y César Muñoz también se hacía eco del reencuentro que se había producido entre Rivera y su madre Isabel Pantoja después de meses distanciados. 

"Gracias Mamá por venir a verme por pasar esa tarde juntos que para nosotros fue tan necesaria. Perdón, perdón por las formas, perdón por no saber controlarme y perder los nervios de una manera que no me caracteriza. Mi corazón necesita sanarse y para ello os necesito a todos y así va a ser", escribió Rivera en redes.

El nuevo código ético

Además de estos vetos, Mediaset también impuso un nuevo código ético. Entre sus puntos más polémicos se encontraba el hecho de que "sus presentadores y colaboradores deben abstenerse de emitir opiniones, preferencias o comentarios políticos en el seno del programa".

Asimismo, añadía ocho puntos más como que los presentadores no podrán "atacar o criticar a ningún otro programa de la compañía o a sus presentadores y colaboradores", algo que ha sucedido durante más de un año entre La Fábrica de la tele y Unicorn Content a raíz de la docuserie de Rocío Carrasco.