La Selección Española femenina de fútbol se proclamaba este domingo campeona del Mundial tras ganar a Inglaterra (1-0) ante una media de 5.599.000 espectadores, 65,7% de cuota, en La 1. Datos que le dan a esta final el récord histórico de audiencia de todas las competiciones femeninas de fútbol.
La final del Mundial femenino de fútbol 2023 fue seguida en algún momento por 8.858.000 espectadores. Además, logró el minuto de oro a las 14:02 horas, con 7.381.000 personas y un 71,1% de cuota de pantalla y el postpartido fue lo más visto del domingo con 6.226.000 espectadores.
Con estos datos, los partidos del Mundial emitidos en La 1 han logrado un promedio de un 41,5% y 1.356.000 telespectadores y más de 12.600.000 personas han contactado en algún momento con los encuentros emitidos en los canales de RTVE. Pero ¿por qué este dato cuando la final se disparó hasta los 5,6 millones de espectadores?
La realidad es que los partidos de la Selección comenzaron con unos datos mucho más modestos. El primero de ellos, disputado el 21 de julio contra Costa Rica, logró un 13,3% y 322.000 espectadores. Lo más llamativo es que fue emitido en La 2 ya que ese mismo día el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitaba La Hora de La 1 en el último día de campaña.
Ya el lunes, el siguiente encuentro pasó a emitirse en la principal cadena pública. Este día, el partido frente a Zambia pegó un buen subidón en audiencias hasta anotar un 20,6% y 511.000 espectadores. Además, más de 1.418.000 personas contactaron en algún momento con la emisión.
El siguiente partido frente a Japón, que supuso además la única derrota del combinado en esta competición, bajó en seguimiento hasta un 18,6% y 449.000 espectadores. Eso sí, en algún momento contactaron con el partido 1.351.000 personas.
El encuentro de cuartos de octavos de final frente a Suiza también perdió seguimiento en espectadores, teniendo en cuenta que su emisión fue a las 7 de la mañana, pero los ganó en cuota de pantalla. Firmó un 37,1% y 398.000 espectadores.
Ya en cuartos de final, 314.000 espectadores (27,4%) trasnocharon -el partido se emitió a las 3 de la mañana- para ver cómo España vencía a Países Bajos. Después, en la prórroga, el dato subió hasta los 356.000 espectadores y 42,7% de cuota.
La hazaña de clasificarse por primera vez para un final tras superar a Suecia fue seguida por un 45,4% y 1.921.000 espectadores. Ayudó y mucho que el encuentro se emitiese a las diez de la mañana. Entonces, hasta 3.755.000 personas contactaron en algún momento con La 1.
Así llegamos hasta la final, donde el dato se multiplicó hasta un 65,7% y 5.599.000 espectadores. Un dato inimaginable hace ahora dos meses cuando este Mundial ni siquiera tenía una cadena que emitiese los partidos. De hecho, no fue hasta el 14 de junio cuando TVE se unió al acuerdo alcanzado por la UER y la FIFA para la emisión del Mundial.
Días antes, el presidente de la FIFA Gianni Infantino había criticado a las televisiones públicas europeas por sus pujas: “Las ofertas de las cadenas de televisión, principalmente en los 'cinco grandes' países europeos, siguen siendo muy decepcionantes y simplemente no son aceptables según cuatro criterios”.
Infantino explicó que en estos países -Inglaterra, Francia, Alemania, Italia y España- las ofertas fueron “de 20 a 100 veces inferiores a la Copa Mundial masculina” aun cuando suponen en audiencia “el 50-60%” del torneo masculino. “Esto es una bofetada en la cara de todas las grandes jugadoras de la Copa Mundial Femenina de la FIFA y de hecho, de todas las mujeres del mundo”, lamentó.