David Valldeperas era uno de los pocos rostros de Sálvame que no se había pronunciado sobre su final en Telecinco. Hasta ahora. El director del que fuera uno de los buques insignia de la última década para la cadena de Fuencarral no se ha cortado a la hora de decir que la cancelación era "un golpe de Estado", en palabras en Querido Hater, el pódcast de Podimo de Malbert.
El periodista cuenta que se enteró de que Sálvame echaba la persiana para siempre "como el resto de España, por la prensa". "Era un viernes, a las siete. Yo me iba y al salir me envía la redacción la noticia que había salido, con fecha y todo", dice, creyendo en que era una "fake news". "Pero tenía demasiados detalles, y al leer el texto, envié un mensaje a los productores. Había estado con ellos por la mañana y entendía que una noticia así me la comunicarían. Le envío un mensaje y me respondieron: 'Espera un momento".
Finalmente, las razones que le argumentaron para explicar el fin del programa era que "había un cambio de línea editorial y ya está". "Era un golpe de Estado. Eso era la hoja de ruta prevista, pero había un golpe de Estado y lo ejecutaron. Yo creo que el fin de Sálvame responde a un cambio de línea editorial", se atreve a decir asegurando "no tener ni idea" de quién lo "orquestó".
"Fue una falta de respeto al programa entero y a todo el mundo. Cuando decides dar un giro, se reúne a las personas y se les cuenta el futuro que esperas de eso, pero hacerlo por detrás, no nos los merecíamos", considera. "Me sentó fatal".
Eso sí, Valldeperas dice estar "seguro" de que en los despachos de Mediaset España rondaba desde hacía tiempo la idea de hacer un "sarao más light". "Sálvame era un programa muy seguido, pero a la vez muy criticado y había una tendencia en querer rebajar el tono del programa y a nosotros, lo que nos gusta es hacer las cosas que se salen de lo normal", apunta. "Modificar el tono del programa era imposible porque tendría que ser de otra manera y con otra gente, entonces era algo que ya venía de atrás. Cuando algo coge tanto poder y tiene tantas horas de visión, ojo. Hay nerviosismo fuera y dentro de la cadena", declara.
"Una ministra le dijo que el programa se convirtió en su "Kit Kat del día. Me daba las gracias porque era su manera de evadirse para poder seguir adelante"
Al ser preguntado por el calificativo que se usó para hablar del final de Sálvame, "telebasura", el director llega a desvelar que una ministra le dijo que el programa se convirtió en su "Kit Kat del día". "Me daba las gracias porque era su manera de evadirse para poder seguir adelante".
Durante la entrevista, Malbert también pregunta sobre Antonio David Flores. Valldeperas asegura que no supo hasta dos días antes lo que iba a pasar. "Me pareció una secuencia de una película de terror. Después de acabar el programa hablé con él y me decía que cómo éramos capaces de hacerle algo así. Yo no había visto el documental y él lo que intentaba saber era hasta dónde llegaba Rocío, quería saber qué material y qué vivencia había contado. Yo le dije: 'Yo no sé nada, pero tú has estado hablando toda la vida hablando, y ahora le toca a ella contar la verdad. Y no vayas por ahí', porque las primeras palabras que pronunció fue '¿cuánto le han pagado por esto?'. Fue la última conversación que tuve con él".
Sobre la Operación Deluxe, Valldeperas se defiende: "Lo único que ha hecho Sálvame y sus directores ha sido ejercer la tarea de periodistas y si eso es ilegal, tendríamos que cerrar todas las revistas de España. Los periodistas trabajan con fuentes, hay una cosa que se llama derecho a la información. Tú a tu red de colaboradores les dices: 'Vamos a hablar de tal', y ellos tienen que buscar información. Cada uno tiene sus fuentes y eso forma parte de la esencia del periodismo".