Alfonso Guerra ha acudido a El Hormiguero de Pablo Motos, en Antena 3, para promocionar su libro La rosa y las espinas: El hombre detrás del político, aunque su entrevista ha estado marcada por sus dardos contra Pedro Sánchez, la amnistía a Puigdemont y los pactos con Bildu.
El exvicepresidente del Gobierno ha asegurado de forma rotunda que los políticos del procés no merecen tal amnistía. "Dieron un golpe de Estado y dicen que volverán a hacerlo", ha dicho. "¿Dónde se ha visto que las leyes las redacten los delincuentes? Eso ya la inhabilita".
Sobre su constitucionalidad, Guerra ha sido tajante: "Cuando digo 'no cabe' repito las palabras que repitió mil veces el presidente del Gobierno, estoy en la línea del secretario general del partido: no cabe". En su opinión, cree que no es "sensato" borrar un delito: "¿Cómo es posible que se negocie con un señor que está buscado por la justicia, que es un prófugo, que declaró que Cataluña era independiente, cogió la maleta y se largó?".
Después de visionar un vídeo realizado por el programa en el que se evidenciaba el cambio de opinión del PSOE sobre la amnistía, Guerra lo ha calificado como una película de "ciencia ficción". El exvicepresidente ha asegurado que la razón que lo explica es porque "faltaban siete votos". "La investidura se ha comprado con eso y con 14.000 millones de euros", ha dicho para añadir: "Si hubiese sido uno de los 121 diputados de Sánchez me hubiera ido a mi casa", ha señalado.
"De progresista no tiene nada, ni eso ni otras cosas", ha valorado sobre la condonación de la deuda a Cataluña. "En cabeza de quién cabe llamarle progresista a Puigdemont, si es lo más reaccionario del mundo". Preguntado sobre si sigue siendo de izquierdas o se ha hecho facha, Guerra ha respondido que "ahora hay un sector de la izquierda que, cuando ve que alguien de verdad es de izquierdas, le llaman facha".
En su opinión, Guerra cree que la división de la sociedad, "la amiga y la enemiga" hace que "no se respete a un señor que pueda ser conservador". De esta forma, si se atiende a este criterio, "en España nunca habrá paz". "Hay una izquierda que no es progresista, sino retrógada. Con etiqueta de izquierda comete los actos y se coloca en posiciones más reaccionarias", ha asegurado criticando que ahora "se han hecho puritanos" y que tienen "patrullas de las costumbres". "Ahora ya no se pueden hacer chistes ni de homosexuales ni de enanos", ha bromeado.
Guerra ha aclarado que no se ha pronunciado en contra del PSOE, pero sí se posiciona en contra de una medida porque "tengo la libertad y el derecho". "Es el partido más importante de España, pero todo está cambiando, hay mucha desorientación, una pérdida del norte total. Si estoy en contra, ¿ya soy un malvado?", ha dicho "sin miedo" a que le expulsen del partido. Por último, Guerra ha sido claro sobre Bildu: "Son mis enemigos, mataron a muchos amigos míos".