En el tramo final de Así es la vida, Sandra Barneda ha conectado con el plató de Ana Rosa Quintana. Algo habitual en los espacios en directo de televisión, pero que no es frecuente ver entre estos dos magacines de Telecinco. “Enseguida comienza a TardeAR y estoy convencida de que seguro que tienen alguna novedad sobre Bárbara Rey, el material prohibido, la entrevista de Ángel Cristo junior... Buenas tardes, Ana”, daba la bienvenida Barneda a su compañera.
“Sandra, muy buenas tardes”, le respondía Quintana desde TardeAR, que pasó a introducir los temas de la tarde. Así, detalló que las nuevas declaraciones de Ángel Cristo “ha vuelto a levantar una polémica tremenda sobre ese supuesto chantaje de Bárbara al rey emérito” y que se profundizaría en el asunto. En concreto, que hablarían con Juan Fernández Miranda, uno de los autores del libro en el que se detalla cómo se realizó esa supuesta extorsión, y que una persona habría llamado a Zarzuela “y dice que tiene fotos, pero pide 100.000 dólares”.
A continuación, explicó que el día antes trataron en el programa cómo la dueña de una guardería daba un bofetón a un bebé, y que hablarían con una madre que también lo ha sufrido con la misma monitora, mostrando entonces una foto del bebé con lesiones.
“Sandra, tú alguna vez te has sentido estafada o te han puesto los cuernos... financieros?”, lanzaba Ana Rosa, una pregunta que dejó a su compañera en shock. “¡Qué susto!”, reconocía Barneda desde Así es la vida. “Has hecho un silencio que he dicho: madre mía, que me tengo desahogar. Cuernos financieros, no, de otro tipo, sí, ya te contesto”, decía con humor la catalana. “A quién no le han puesto los cuernos”, bromeaba Quintana, que antes de despedirse felicitó a su compañera por el programa.
Ya en TardeAR se vio el reportaje en el que se indagaba en esto de los cuernos financieros. Jorge Luque protagonizó un reportaje en el que preguntó a diferentes personas si le cuentan a su pareja todo el dinero que gastan, pues las finanzas son el cuarto motivo de divorcio en España. En la pieza jugaron a Su media finanza, en homenaje a Su media naranja de Jesús Puente, y preguntaron a varias parejas por los gastos del otro, y una de ellas acabó recibiendo como premio una cena en el restaurante nacional que elijan.