La huella de Tino Casal en el Festival de Benidorm que animó a Varry Brava a presentar ‘Raffaella’

Unas horas antes de la celebración de Nochebuena, la plataforma atresplayer estrena este 24 de diciembre Tino Casal, una serie documental de tres episodios sobre el gran artista de origen asturiano. Un hombre al que conocemos por su gran voz y su imagen única, pero que también fue compositor, arreglista, escultor, diseñador gráfico, pintor y todo aquello que le permitiese contarle algo al mundo desde su prisma único.

En esta producción, con capítulos de unos 25 minutos, nos adentraremos en la vida personal de Tino, así como en su carrera musical, desde que empezase en sus primeros grupos hasta que acabó triunfando con éxitos como Eloise, Champú de huevo u Oro negro.

Para contar cómo fue, el director Alfonso Albacete (Mentiras y gordas, Sobreviviré) ha sentado delante de su cámara a personas que lo conocieron bien, como Paco Clavel, Antonio Alvarado o Paloma Aznar, Vampirela, así como a artistas más jóvenes en los que dejó su huella, como Alberto Jiménez de Miss Cafeína, Agoney y Marta Sango, así como a periodistas especializados, como Valeria Vegas. Y una mención especial para Antonio Estrella, artista fallecido en febrero de este mismo 2023 a los 63 años, y que formó parte del círculo de Casal. El propio Alfonso Albacete firma el guion junto a Antonio Asencio, y se trata de una nueva serie documental producida por Atresmedia Televisión, en colaboración con La Cometa TV.

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Con el Benidorm Fest a la vuelta de la esquina, y precisamente, con Miss Cafeína como uno de sus participantes, resulta interesante que esta serie documental nos recuerde cómo Tino Casal participó en el Festival de Benidorm de 1978, con el tema Emborráchate. Una canción que fue mal vista por algunos por el mensaje que le interpretaban, y que fue de los últimos trabajos que realizó con el nombre artístico de Tino Casal, pues los hits que le conocemos los firmó como Casal, a secas. “Había una campaña sobre el alcohol en América y se conoce que no vieron mucho futuro. Decían que esa canción incitaba al alcoholismo, ahora no sé qué sería esto”, lamentaban las hermanas de Tino, que participan en el documental.

“Para nosotros la experiencia del Benidorm Fest fue maravillosa. Aprendimos un montón, es una experiencia nueva que vivimos al máximo. Estuvimos en el Benidorm Fest, entre otras cosas, porque figuras importantes como Tino Casal también estuvieron, no ganó, y años después seguimos hablando de él”, relata en un momento del primer episodio Óscar Ferrer, de Vary Brava, quien participó en el Benidorm Fest de 2022 con el tema Raffaella. Como Tino, el trío no ganó el certamen musical, pero logró que la canción fuese una de las que más sonó aquel año.

La serie tiene un ritmo ágil, rápido, que nos invita a conocer más de Tino Casal. Un hombre que siempre tuvo un particular gusto estético, un sentido de la moda que pocos alcanzaban a comprender, y quizá eso jugó en su contra. Como dice en un momento Alberto Jiménez, su presencia era tan fuerte que a veces costaba a la gente de su época entender la grandeza artística que tenía a sus espaldas.

Y es que el vestuario, para Tino, era algo fundamental. Cristina Rodríguez o Eduardo Navarrete hablan del camino que abrió en la moda en España, y fue esa importancia de la estética la que le jugó una mala pasada para su salud. Un tobillo torcido durante una actuación le hizo tomar pastillas para el dolor (tras un consejo de Massiel, al parecer) de forma incontrolada, sin seguimiento médico, y que le provocó una descalcificación que le obligó a estar ingresado en el hospital. De él, como de otros artistas de la época, como Miguel Bosé, se llegó a decir que tenía sida, no siendo más que un bulo que tuvo que desmentir de su propia boca.

Otro de los puntos que resultan interesantes del documental es cómo se aborda la orientación sexual de Tino Casal, a quien se le conoció una novia, Pepa Ojanguren, pero también se movía por círculos homosexuales. En este sentido, es una maravilla cuando algunos hablan de ambigüedad, y Carlos Ferrando dice que de ambiguo nada, que Tino era una señora.

Tino murió el 22 de septiembre de 1991, en un accidente de tráfico, en el que las costillas le partieron, literalmente, el corazón. Una siniestra casualidad, pues poco antes le preguntaron en una entrevista que cómo imaginaba su deceso, y dijo que tendrían que clavarle una estaca en el corazón, porque era un vampiro. Un suceso que salió en todos los informativos y programas de televisión, y es así, con esa aciaga noticia como arranca esta producción exclusiva de atresplayer.