Este pasado sábado 30 de diciembre, Emma García logró tener para Fiesta la primera entrevista de Andy y Lucas después de que el dúo anunciase su separación (aclarando que, más bien, se trata de una interrupción temporal por salud). Ambos han querido reconocer no sólo el cariño que ha transmitido el magacín vespertino, sino la labor de la presentadora ordiziarra, cuyo programa es uno de los pocos que da un espacio a la música en el horario de tarde.
Es más, Lucas González ha confesado ser seguidor del magacín, de ahí que entrase rápido en directo cuando surgieron informaciones sobre una supuesta mala relación entre él y su “hermano” Andy Morales. Aprovechando que estaba en plató, el gaditano le confesó a la presentadora que le encanta cuando parece que le va a dar un ataque de risa en directo. “Cuando te vaya a dar un ataque de risa, suelta la risa, por favor, porque me lo contagias desde casa”, compartía divertido el cantante.
La ordiziarra confesaba que debía controlarlos, dado que son muchas horas de directo. “Luego tengo unas cuantas horas por delante de programa y, cuando lo suelto, no puedo parar", respondía la conductora, con la que el gaditano quiso recordar el ya emblemático momento que ésta vivió con Cristina Cárdenas durante su etapa en Viva la vida. En ese momento, la antigua amiga de Rocío Carrasco se sentaba en el extinto magacín producido por Cuarzo.
El motivo por el que acudía al formato era para denunciar unos supuestos malos tratos que vivió Carrasco por parte de su ex, Antonio David Flores. El caso es que se trataba de una información delicada y muy seria. Ahora bien, Cárdenas rompió ese momento tenso cuando le envió un mensaje un tanto singular al exguardia civil en directo. Mirando a la cámara, la antigua amistad de la hija de Rocío Jurado se levantaba del sofá y se ponía a cantar el tema de las películas de la saga de terror Pesadilla en Elm Street.
“Nunca más dormirás”, le dijo a quien fuese primer marido de Rocío Carrasco y padre de sus dos hijos. Emma García se quedó completamente perpleja. Posteriormente, ha reconocido que lo que vivió fue “el momento más surrealista de su carrera”. Rememorando esa situación, Lucas quiso saber cómo evitó que le entrase un ataque de risa o una carcajada nerviosa. Por supuesto, la ordiziarra tiró de profesionalidad.
“Estábamos tratando un tema muy serio, era el tema de un maltrato”, respondía, volviendo a hacer alarde de cómo cuando toca ser irreverente se es, como también cuando toca llevar un tema con rigurosidad. Eso sí, la presentadora confesó que no dudó en soltar esa carcajada reprimida en otro momento del programa. “Luego ya me reí por cualquier cosa y lo solté, pero es una de las cosas más complicadas”, admitía al dúo.