El hallazgo del cuerpo sin vida de Paco Arévalo en su casa de Valencia durante la tarde de este miércoles, 3 de enero, paralizó al mundo de la televisión y del humor. Su muerte ha dejado especialmente afectado a su amigo íntimo Bertín Osborne, con el que compartía confidencias, juergas y hasta proyectos profesionales como el de Dos Mellizos en el teatro.

El cantante de rancheras ha roto su silencio en En boca de todos, el programa que presenta Nacho Abad en Cuatro. Lo hacía visiblemente enfermo, tosiendo debido a un "covid horrible" que le ha impedido ir al tanatorio para despedirse de Arévalo. Su participación, por cierto, se ha producido en mitad del revuelo que ha montado tras decir que no iba a ejercer de padre, a raíz del nacimiento de su hijo con Gabriela Guillén.

Bertín ha recordado que Arévalo fue el primer amigo que tuvo cuando empezó en la profesión, hace más de cuatro décadas. "Ha sido una vida juntos, hemos convivido muchos años y era como mi hermano", ha dicho devastado revelando que se enteró de su fallecimiento a través de una llamada de "mi otro hermanito, José Luis López El Turronero" sobre las nueve de la noche. "Casi me un chungo".

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Pero lo que más dolor le ha provocado al presentador de Canal Sur es que hace un mes tuvo con él una "bronca por teléfono" porque intentó cambiar sus malos hábitos de vida, pues tenía un sobrepeso de 40 kilos y apenas salía a andar. "Yo soy una persona que me cuido mucho, que hago deporte y Paco no. Desde la muerte de Elena, su mujer, fue cuesta abajo y se medio abandonó".

"Le pegué un broncazo. Le dije de todo y no sabes lo que me arrepiento porque le dije 'cualquier día te va a pasar algo y vas a dejar a tu familia...' Cuando anoche me lo contó José Luis casi me da a mí un infarto", ha proseguido diciendo. "Los buenos amigos se dicen las cosas malas y las duras", añadía Abad en plató.

"Desde ese día se cabreó conmigo porque le dije eso. Le dije 'No vas a durar nada. No puedes seguir así. Tienes que andar, adelgazar. Opérate", ha desvelado para lamentar después: "Él se ha ocupado de todos, menos de sí mismo. Yo he asumido que es un infarto porque otra cosa no tenía. Ha sido un infarto, te lo digo al 90%. Era el candidato perfecto: un sobrepeso acojonante y no moverse".