A inicios de enero, la revista Semana sorprendió al revelar que Mónica Cervera vivía en la indigencia. La actriz, nominada a un Goya y conocida por su papel en La que se avecina, se encuentra en una situación límite desde hace semanas, durmiendo a la intemperie y pidiendo en los semáforos para poder subsistir, tal y como desveló la publicación.
Un banco de un parque de su Marbella natal le sirve de cama, mientras que una mochila y un bolsón de cuadros con ropa son sus únicas pertenencias. Sin embargo, vivir en la calle ha sido decisión de la propia Mónica Cervera, según apuntó la revista Semana. La actriz tiene un domicilio al que volver, el de sus padres en la localidad malagueña, sin embargo, por razones de las que no quiere hablar, prefiere estar fuera de su casa.
Cervera insiste en que no necesita "nada de nadie", pero intenta recurrir a la ayuda de distintas entidades para poder tener una mejor calidad de vida. Este sábado, la actriz, de 48 años, ha hablado por primera vez ante las cámaras. En concreto, un equipo del programa Fiesta, de Telecinco, se trasladó hasta Marbella para conocer de primera mano cómo se encuentra.
Las palabras de Mónica Cervera en 'Fiesta'
El proyecto más significativo de Mónica Cervera en cine fue Crimen ferpecto, de Álex de la Iglesia, un papel protagonista que le valió una nominación al Goya a Mejor actriz revelación en 2005. La actriz apareció en otros largometrajes como Entre vivir y soñar, 20 centímetros y Busco, mientras que en televisión participó en series como Manos a la obra o Con dos tacones.
La última vez que Mónica Cervera apareció en televisión fue en 2016, en tres episodios de la serie La que se avecina. Desde entonces, no se conocían más proyectos profesionales de la actriz, cuya vida ha dado un cambio radical. Un reportero del programa Fiesta localizó a la intérprete en Marbella y pudo charlar con ella.
En las imágenes captadas por el programa se puede ver a la actriz vagando por las calles de Marbella, con una mochila a la espalda y una bolsa colgada al hombro, lavándose los dientes en el parque y durmiendo en un banco a plena luz del día.
Mónica Cervera no quiso entrar en directo en Fiesta, pero accedió a hablar con el reportero, al que contó que estaba "intentando salir de aquí con mis propios pasos". "Llevo un año y medio esperando la renta mínima de inserción o el ingreso mínimo vital y estoy a la espera, simplemente, de que me lo aprueben". La actriz explicó que a finales de enero tiene cita con Servicios Sociales "para empezar esa nueva vida que está deseando ya comenzar".
El reportero de Fiesta señaló que la actriz se había puesto "un poco nerviosa cuando le preguntábamos si le gustaría volver a estar dentro de algún proyecto televisivo o en el cine". "Nos dice que no quiere saber absolutamente nada de ese mundo, que es una vida que ya ha dejado en el pasado", comentó.
Mónica Cervera confesó al periodista que quiere trabajar, pero "de otra manera". "Quiero cambiar de profesión totalmente, no quiero ni que sepáis ni a qué me dedico, ni a dónde voy o de dónde vengo… Nada".
La propia Mónica Cervera, que se encuentra "entera y aseada", según el reportero, aseguró que estaba "bien, esperando". "No te preocupes por mí, habéis estado 15 años sin mí y, de repente, ¿ahora os preocupáis por mí, de qué? Con perdón por las palabras, pero estoy hasta el moño. Me da igual. Es que no quiero saber nada".
En cuanto al porqué de su decisión de vivir en la calle y no con sus padres, la actriz prefiere no hablar. "Nos comentaba que era un tema muy personal, que prefería reservarse para sí misma y nos volvía a decir otra vez que se encontraba bien y, sobre todo, que no quería volver a salir en una pantalla de televisión", aseguró el reportero.