La cantante Chanel Terrero ha vuelto hoy a El Hormiguero para promocionar, al fin, su ansiado primer disco. Un álbum titulado agua y que llega casi dos años después de que captase todas las miradas durante su participación en el Benidorm Fest. “Esta es mi primera vez, es como un amor adolescente en el que todo me parece bello”, decía la invitada sobre la experiencia.
“Estoy preparando shows en directo, y estaré en el Share Festival el 9 junio. Estoy pensando ya en lo siguiente, en qué más, en cómo llevar este disco al directo. Estoy con mi entrenador personal, con mi profesor de canto…”, continuaba diciendo sobre este proyecto musical. En ese sentido, no quiso dar más fechas, pues no están confirmadas y temía que hablar antes de tiempo no trajese nada bueno.
Chanel es conocida por su gran capacidad para cantar y bailar a la vez, y Pablo Motos le preguntó por su disciplina. “Todo se entrena”, se sinceraba ella, mientras la hormiga Petancas volvía a interrumpir para pedir el número de su entrenador personal.
Sobre cómo se deja la piel, literalmente, en el escenario, Pablo Motos puso sobre la mesa que cuando grabó el videoclip del tema Clavaito “sangrabas por los pies”. “Llevaba medias de rejilla y tacones, el suelo era de hormigón, y al haber muchas repeticiones era lo que había”, reconocía Terrero. “Si ha que sangrar, se sangra. No sé si es un mensaje muy positivo”, continuaba diciendo en ese sentido.
Sobre su forma de trabajar, contó que tiene un entrenamiento muy marcado en el que combina los ejercicios de cardio, con los de fuerza y con el canto. Y también que suele correr y cantar en la cinta, todo a la vez, en lo que definió como “un entrenamiento extremo para llegar a mi mejor versión”.
Tras hablar de cómo mucha gente se le acerca para una foto, Chanel contó que en cierta ocasión estaba en el bingo, y un trabajador le quitó el cartón que tenía para pedirle una instantánea juntos. “Igual gané el bingo”, comentaba con humor, dejando claro que no sabe qué fue de aquel cartón. Pablo Motos le preguntó si suele ir al bingo y si tiene suerte, y ella le explicó que sí. Y que además, se encuentra con gente de mi edad. “Hace poco canté un bingo de una alta cantidad, y había un grupo de chicos jóvenes que cuando se fueron me dijeron: Chanel ganadora”. Pablo Motos le confesó entonces que nunca había ido a un bingo. “¡Tienes que ir!”, le propuso la invitada, que acabó detallando que el bingo que se llevó era cercano a los mil euros, y que lo repartieron entre los amigos que acudieron juntos a la sala.