Manuel Díaz 'El Cordobés' y Xavier Sardà se enzarzaron este miércoles en TardeAR. El programa que presenta Ana Rosa Quintana en Telecinco puso sobre la mesa el plantón de Juan Ortega a su prometida Carmen Otte en el altar, después de que el torero rompiera su silencio con Carlos Herrera en la COPE. El diestro confesó al veterano locutor que su decisión "no fue un arrebato".
Todo ocurrió porque Sardà quería que su compañero compartiera con el público lo que minutos antes había dicho detrás de las cámaras. "¿Hay algún torero heterosexual?", preguntó primero el colaborador catalán descolocando por completo a El Cordobés. "¿Qué es eso? No sé lo que es", contestó él haciendo reír al resto.
Instantes después, Sardà volvía a apretarle. "Te está temblando el semblante por todo lo que nos has contando antes y no quieres contar ahora. No estoy bromeando". "No se te puede contar nada. Eso era una conversación entre nosotros y tú me sonsacas", replicó el torero visiblemente molesto.
Pero lo que parecía un divertido pique, que hasta provocaba las risas en plató, acabó convirtiéndose en un momento realmente tenso. En ese preciso instante, Alaska intervino para matizar que lo que había contado Manuel entre bambalinas "no es una información, es una idea". "¡Pues dila!", insistió nuevamente Sardà.
"Si yo me voy a casar con una persona, aunque las formas no seas adecuadas, prefiero no dar un paso en falso en mi vida y decir 'pues oye, si esto no va a funcionar, lo cortamos", opinó El Cordobés alineándose con su colega de profesión. "¿Te haces el bueno ahora?", saltó Sardà indignado porque minutos antes les había contado una "tesis" diferente "de lo que pasó".
"Hombre, te he dicho que el miedo es libre", dijo Manuel, a lo que Sardà fue más allá al preguntarle con la clara intención de sonsacar información: "¿Y puede ser que alguien le dijese que no tenía narices de no casarse?". El Cordobés volvió a intervenir, pero a Sardà seguía insatisfecho: "Sí. Bla, bla, bla. Tú has dicho que fue casi una apuesta". "¿Pero qué estás inventando?", se molestó su compañero.
El torero acabó totalmente enfadado ante la insistencia de Sardà para que aireara lo que les había dicho con el piloto de la cámara apagado. "Yo confiaba en ti y pensé que nunca dirías algo que te he contado en privado. Me has demostrado que no eres mi amigo", dijo El Cordobés.
Sardà no lo dejó pasar y entró al trapo: "Yo sí confiaba en ti. Estamos en televisión, y ahí [fuera de cámaras] te haces el bocachanclas y aquí cierras la boca". Manuel, con el gesto muy serio, aseguró después que es un "novato" y que el que fuera presentador de Crónicas Marcianas siempre intenta que se vaya de la lengua en directo.