El universo de Gran hermano se viste de luto. Y es que ha fallecido a los 58 años Conrad Chase, uno de los concursantes más carismáticos de la sexta edición, emitida en el año 2004. El también actor y cantante llegó al reality en la gala número 4 como reserva, pero supo meterse a la audiencia y a sus compañeros en el bolsillo hasta llegar a ser finalista.
El vencedor de aquella sexta temporada fue Juanjo Mateo, con quien Conrad tuvo muy buena relación. Tanto es así que, incluso, se lanzaron juntos a la aventura musical lanzando el tema La Gozadera, que presentaron en varios programas de televisión. Más tarde, Conrad, grabaría otro sencillo llamado No te quiero más junto con Las Latinas, y que fue incluido en un disco veraniego. No obstante, en su juventud, Conrad ya estuvo en un grupo musical llamado The Baja Boys.
Su muerte se ha conocido a través de Telegenia, empresa de representación. “Lamentamos el fallecimiento de Conrad Chase, concursante de 'Gran Hermano 6'. Acompañamos en el sentimiento a sus compañeros, amigos y familiares”, compartían en la red social X, anteriormente conocido como Twitter. El mensaje ha tenido reacciones de antiguos concursantes de Gran Hermano.
Hay que recordar que aquella sexta edición de Gran Hermano estuvo marcada por los abandonos voluntarios; hubo hasta tres, Mercedes, Ángel y Sandra. Juanjo entró como reserva en la cuarta gala. La popularidad que le otorgó el programa le permitió acudir a otros formatos de Telecinco de la época, como Crónicas Marcianas o A tu lado. En concreto, fue este empresario nacido en Maine, Estados Unidos, fue el segundo de los reservas, pues antes de él, ya había entrado en calidad de reserva Natacha Jalitt. Desgraciadamente, como Conrad, Natacha también tuvo una muerte prematura, pues en 2019 fue encontrada muerta en una sala de fiestas en Argentina.
Más allá de la pequeña pantalla, Conrad era, desde 2013, propietario de un restaurante en Florida, en Estados Unidos. En su perfil de LinKedin apuntaba también que trabajó el Centro de Señales del Ejército de Estados Unidos como operador de un centro de telecomunicaciones, y trabajó en diferentes proyectos tecnológicos. El más destacado fue la implantación de un chip bajo la piel para acceder a reservados en discotecas, tal como recogió la prensa en su momento. Eso sin olvidar su breve aventura como actor, oficio que desempeñó en varias producciones audiovisuales.