Este miércoles, día de San Valentín, Espejo Público ha contado la historia de María, una chica de once años, que convive con un sarcoma de Ewing desde que tiene siete. Una variante del cáncer que le afecta a los huesos y al tejido que lo rodea, y que afecta principalmente a personas jóvenes.

Según contaron en el programa que presenta Susanna Griso, María soñaba con ser futbolista y es una gran hincha del Atlético de Madrid. Para dar a conocer su enfermedad e impulsar su investigación se creó La sonrisa de María, una organización que ha contado con aliados como el torero Gonzalo Caballero, la infanta Elena o el futbolista Álvaro Morata, de quien María es gran admiradora.

María y Gonzalo han estado en el plató del matinal de Antena 3 para narrar la labor que hacen. “La sonrisa de María está cautivando a todo el mundo. Yo, que lo pasé con mi padre, no tenía la consciencia de lo importante que es la investigación”, explicaba el torero, cuyo padre falleció de la misma enfermedad. En la actualidad, el sarcoma de Ewing ha afectado principalmente el húmero, la boca, la espalda, el sacro, la rodilla y los dos hombros de la pequeña. “Cuando empecé estuve con morfina para que se me quitaran los dolores”, desvelaba María, quien puede hacer una vida medio normal. “Los médicos se pensaban que no iban a andar, y gracias a Dios, ando”, añadía.

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Uno de los contenidos favoritos de María es la serie Amar es para siempre, de Antena 3, y en especial admira a Manu Baquerio, actor que interpreta el personaje de Marcelino. “Aunque en la vida real es del Madrid, en la serie es del Atleti y me cae gusta mucho cómo hace la serie”, explicaba. Y por esa razón, el programa de Susanna Griso ha querido cumplir uno de los deseos de María.

Fingiendo que había problemas con el sonido del micrófono que llevaba la invitada, Manu Baqueiro entró al plató, como si fuese un técnico. Para disimular, incluso apostó por emplear un acento argentino, hasta que finalmente reveló su identidad. “Soy tu Marcelino”, le decía ya con su voz, y dándole un beso en la cara.

“¡Dame un abrazo! Ven aquí, campeona!”, le decía a una sorprendida María, y aclaraba que apostó por poner otro acento “porque si no, me pilla”. “Solo quiero darte un abrazo muy fuerte y decirte que estoy muy orgulloso de ti y de cómo luchas”, añadía el actor, que no pudo aguantar las lágrimas. Además, avanzó que se verá con María el próximo miércoles en una gala donde se subastará un delantal firmado por los actores de Amar es para siempre.