Operación Triunfo 2023 llega a su fin. Y para sorpresa de nadie, un año más se ha llenado de comentarios muy duros hacia los concursantes. Tanto que desde el perfil del programa han tenido que salir al paso desde la cuenta de X para advertir de que no se van a consentir las faltas de respeto.
"Estamos denunciando todas las cuentas que ofenden, insultan y menosprecian a estas personas que, lo único que hacen, es formarse como artistas y compartir su día a día con los fans de este programa. Solo quedan 4 días, disfrutémoslos ¡Viva OT!", escribían.
Y decimos para sorpresa de nadie porque es algo habitual en este programa, en el que la mayoría de sus seguidores son jóvenes, que aparezcan este tipo de actitudes en redes sociales. De hecho, estos días han rescatado un vídeo en el que se veía a unas fans diciendo que iban a buscar un póster de Chenoa para quemarlo.
Una de las concursantes que más comentarios negativos ha recibido en las últimas semanas ha sido Ruslana. Muchos seguidores consideran que la joven ucraniana ha tirado abajo su concurso y las posibilidades de ganar por su actitud "arrogante". "La actitud de Ruslana me parece de cría y es que no quiero ni que llegue a la final", escribía un perfil creado en 2020. ¿Saben qué edad tiene Ruslana? ¡Dieciocho! ¿Cómo no va a tener en ocasiones ese tipo de actitud? ¡Es que hasta casi es necesario que las tenga! ¿Qué actitudes teníamos nosotros a esa edad?
Y digo esto porque lo más llamativo es que gente adulta también ha reprochado a la joven esta actitud. Parece que no hemos aprendido nada con el tiempo y que solo nos quedamos con una de las ideas de triunfo que se tiene en la sociedad. ¿Qué es el triunfo? ¿Triunfar es solo llenar el WiZink Center? ¿Ganar un Grammy? El triunfo es mucho más que eso, tanto en lo que se refiere a lo profesional como en el personal.
En lo que se refiere a lo profesional, ¿ha triunfado menos Ricky Merino por no vender como vende Aitana cuando ha conseguido presentar programas de televisión o protagonizar musicales como Ghost o Una rubia muy legal? ¿O Chica Sobresalto (Maialen) que lleva consiguiendo lanzar la música en la que ella cree?
Precisamente ella tuvo el mejor discurso que se ha podido hacer en este programa. "Siempre he tenido la sensación de que tengo que hacer las cosas 7.000 veces para que se me vea una. Y aquí me han dado una oportunidad de la leche de enseñar lo que hago. Muchas gracias y os lo devolveré con canciones".
Y así ha sido. Lo ha devuelto con canciones. Canciones que quizá no han sonado como las de Aitana o Lola Índigo en las emisoras musicales o en grandes estadios. Pero que han sido SUS canciones. Canciones que han salido desde sus entrañas y con las que habrá aprendido importantes lecciones de vida.
Porque justo eso puede ser OT para sus concursantes: una lección de vida. A lo mejor logran el éxito que antes lograron otros. Pero probablemente no. Pero no pasa nada. Porque al fracasar se adquieren valiosas lecciones que no se pueden aprender de otra manera. A lo mejor encuentran que ese no es su camino o que lo es de distinta forma. Y eso es un auténtico triunfo personal.
Algo así como lo que contó Javier Ambrossi en la pasada gala de los Goya. "En 2013 vine a esta gala con mi hermana Macarena (García) y la vi recoger el premio a mejor actriz revelación. Ese momento me marcó para siempre porque fue precioso para ella porque iniciaba su carrera, pero también pasó algo muy fuerte: me di cuenta de que quizá yo no era actor. Y al volver a casa pensé en que tenía que escribir". Y ahí está triunfando.
Cuando el lunes se apaguen los focos, una nueva vida comenzará para estos nuevos triunfitos. Disfrutarán de la fama, del dinero de estos primeros conciertos, de las invitaciones a eventos increíbles donde vivirán experiencias únicas y se codearán con famosos, del acercamiento de cierta gente de la música que les harán soñar.
Pero luego llegará el aterrizaje. Lo duro de esta industria. Lo duro de esta vida. Y entonces será imprescindible tener una buena red de apoyo, de saber rodearse de buena gente, de solicitar ayuda profesional porque a esas edades es difícil estar preparado para semejante montaña rusa de emociones.
Y sobre todo saber que la vida es larga. Mucho. Y que lo que no se alcanza hoy, quizá se consiga en un futuro. Ahí está el caso de Nebulossa, que con 47 y 55 años van a representar a España en Eurovisión. Y si no, no pasará nada. Porque el simple hecho de haber hecho el camino ya habrá supuesto el mejor de los aprendizajes.