No hay dudas de que Supervivientes se ha ganado a pulso el que sea el rey de los realities. Más allá de las clásicas tramas de telerrealidad, tiene el factor de supervivencia, aventura y pruebas. De ahí, que no sea un formato para todo el mundo. El agotamiento mental, el cansancio físico, el que las comidas sean muy justas y precarias y la pérdida de peso afectan a cada uno de los participantes. De ahí, que sea un programa donde las malas actitudes tengas una penalización mayor.
Por primera vez en la historia del programa, la organización ha puesto en cuestión la condición de lo que es un superviviente. El espacio producido por Cuarzo ha lanzado un durísimo comunicado que ha sido leído por Laura Madrueño. En él, la dirección ha ordenado a los dos grupos una misión muy seria con el objetivo de evitar terribles consecuencias.
De nada han servido los ligeros toques de atención que se han dado desde la organización del reality. De hecho, este aviso interrumpió parte de la décima gala del programa que conduce Jorge Javier Vázquez. La dirección reconocía una “situación preocupante” tras más de dos meses de concurso. A pesar de que los participantes habían comenzado con fuerza e ímpetu, esto parece haberse perdido en las últimas semanas.
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De ahí, que la dirección haya querido dar un toque de atención ante la situación de los concursantes, que han pasado del ímpetu a la desidia. “Esto ha cambiado en los últimos días. El agotamiento, la desidia y la falta de energía os han llevado hasta el punto de haber olvidado el gran objetivo de vuestro paso por esta aventura: la supervivencia”, expresa el comunicado.
“La pesca, el cuidado del fuego, la recogida de leña, son algunas de las actividades que estáis abandonando estos últimos días, convirtiendo el cansancio en la base de vuestra experiencia”, proseguía. Esta semana, los equipos Olimpo y Condena estaban liderados por Rubén Torres y Ángel Cristo Jr.
“Si de verdad queréis ser dignos merecedores de vivir Supervivientes, os tendréis que enfrentar a un duro reto conjunto”, advertía el comunicado. La dirección exige que ambos grupos pesquen 100 peces en total para el próximo jueves. “[Es] para demostrar si, realmente, debéis seguir en esa aventura y merecer el título de supervivientes”, avisaba el comunicado.
En caso de incumplir con la misión, la organización se verá obligada a “rebajar la dotación al máximo”. Con lo cual, todos los concursantes ‘deberán ponerse las pilas. “Espero que no me decepcionéis”, advertía la dirección.
Por otro lado, se resolvió el destino de Laura Matamoros. La influencer pudo salir del hospital y volver a Cayos Cochinos. Ahora bien, su estancia duró poco, dado que fue la nueva expulsada del público. Se terminaba así la segunda aventura de la hija de Kiko Matamoros en Honduras. Además, los nominados de esta semana son Aurah Ruiz, Pedro García Aguado, Gorka Ibarguren y Javier Ungría.