No es ningún secreto que Belén Esteban padece de diabetes. La colaboradora es una de las figuras públicas que más ha hablado abiertamente del trastorno metabólico que padece y también le ha dado su justa visibilidad. La empresaria ha vuelto a comentar cómo maneja la falta de producción de insulina en su cuerpo. Eso sí, lo ha hecho sincerándose sobre cómo lo ha vivido desde que se lo detectaron y cómo lo ha manejado tanto ella como su familia.
Mientras Ni que fuéramos Shhh preparaba una exclusiva sobre el sexo del bebé que espera Anabel Pantoja, el programa recordaba unas declaraciones que la de Paracuellos había dejado en el pódcast Todo sobre tu madre de La Forte. La televisiva compartía cómo lleva la fama o cómo a su madre no le gusta que su hija no le guste a todo el mundo. Sin embargo, fue recordar cómo sus progenitores lidiaron con su diabetes en su niñez lo que más sorprendió.
“Yo he sido [siempre] muy delicada. Con 10 añitos, me detectaron falta de azúcar. Yo soy diabética. Para mis padres, eso fue lo peor. Había que vigilar todas las comidas. Ahora, gracias a la bomba [de insulina] me controlo muy bien. Pero recuerdo que mi madre me pesaba todo. Mi padre jamás me vio cómo me pinchaban insulina”, le confesaba a la locutora, quien le preguntó si su progenitor “era aprensivo”.
“Ahora están la bomba o la pluma, pero antes era una jeringa con aguja. Todo me lo hacía mi madre, mi padre lo pasaba muy mal”, admitía la fundadora de la firma Sabores de la Esteban. Sobre su relación con los dulces, la de Paracuellos admite que es “golosa”, aunque con matices. “Como sé que no lo puedo comer, mi cuerpo como que lo ha rechazado. Pero, lo que más me gusta de dulces y echo de menos en mi vida son los dónuts”, expresaba en el pódcast.
Ya volviendo a plató, María Patiño le confesaba a Belén Esteban que “nunca había pensado” que su padre fuera “tan aprensivo”. “Sí, nunca me vio pincharme. En la vida. Él sufría mucho por mí. Era la más pequeña de sus hijos y la única niña, mis dos hermanos mayores eran chicos”, comentaba, recordando que también su madre lo “pasaba muy mal con el azúcar”.
La de Paracuellos recordaba también cómo a su progenitora le cuesta entender que su hija no caiga bien a todos. “Es verdad que mi madre tiene 81 años y no entiende que haya gente a la que no le guste. Sí, la hay muy cariñosa, pero otra que es todo lo contrario. Yo lo llevo bien”, reconocía.
Patiño quiso saber cómo le condicionó a Esteban el padecer diabetes desde tan corta edad. “No podía [comer chucherías o bollos]. En aquellos años no era como ahora. Al azúcar la llaman la enfermedad asesina. Si no te das cuenta y no te tratas, te puede afectar a la vista, al riñón. Gracias a Dios, desde que llevo la bomba, a mí me ha cambiado la vida completamente”, expresaba la empresaria, sacando el aparato para mostrarlo de ejemplo.
La ganadora de GH VIP 3 era interrumpida por David Valldeperas, dado que se habían encontrado las imágenes de Europa Press en las que la madre de Anabel Pantoja, presuntamente, había revelado el sexo del bebé que espera su hija.